¿Se puede comprar La Moneda?

¿Se puede comprar La Moneda?

26 Agosto 2009
En el caso de los candidatos parlamentarios (Frei, Enríquez, Navarro y Zaldívar) uno podría sospechar que las asignaciones de pasajes aéreos, bencina y todo beneficio que el Estado les da para cumplir sus tareas se usa en otra cosa ¿O no?
Matias Carrozzi >
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Por ahora el tema de moda en la carrera presidencial es saber cuánto dinero han gastado los postulantes a La Moneda en sus candidaturas, preocupación que tiene a cientos de perfectos personajes detrás de la cifra exacta con que el contrario pretende comprar la presidencia de la República, búsqueda tan frenética que pareciera que la revelación de ese monto determinará la elección.
Si mal no recuerdo, hace un par de mesas Sebastián Piñera dijo que se gastaría en su campaña cerca de nueve millones de dólares, es decir, unos cuatro mil ochocientos sesenta millones de pesos chilenos a un dólar de 540 pesos. No tengo el dato de si este monto será el invertido sólo en el período legal de campaña o comprende también lo que ha realizado hasta el momento, por lo que la cifra podría ser superior.
Ahora bien, en el caso de Piñera uno podría suponer de dónde sale ese dinero, ya que para nadie es un misterio que su fortuna personal es considerable y puede hacer con ella lo que se le antoje. Es así que, siguiendo la misma lógica, me pregunto de dónde sale la plata de los demás candidatos. Porque por más que digan que no hacen publicidad en los medios de comunicación, me imagino que las oficinas (comandos), teléfonos, viajes, banderas, desayunos, almuerzos, escenografías, equipo profesional, secretarias, papelería, etc. tienen un costo. ¿O no?.
En el caso de los candidatos parlamentarios (Frei, Enríquez, Navarro y Zaldivar) uno podría sospechar que las asignaciones de pasajes aéreos, bencina, correo y todo aquel beneficio que el Estado pone a su disposición para el buen desempeño de sus funciones parlamentarias, estarían siendo utilizadas en sus postulaciones. Por consiguiente, ¿no son ellos acaso quienes deben justificar, clara y razonablemente, cómo están financiando sus operaciones electorales?.
Por otra parte, parece ridículo el debate del dinero en un país como Chile. El padrón electoral está momificado y el análisis del costo beneficio para una inversión electoral sólo se justificaría si la tasa de movilidad fuese superior al 25%. Ejemplos hay muchos y otroras candidatos presidenciales y parlamentarios podrán dar fe a lo que escribo, por cuanto se gastaron cifras siderales en sus postulaciones y no consiguieron el objetivo de ser electos.
Es más, me atrevería a sugerir que el tener dinero le juega en contra a un candidato, ya que no parece posible que se movilice a los contribuyentes a aportar económicamente a su campaña, puesto que no lo requiere. Esta situación en particular fue la hazaña que más se le aplaude al Presidente Obama, personaje al cual varios quieren imitar. Es más, el único que parece haber entendido ese concepto es Marco Enríquez, quien tiene una estructura definida para la recolección de dinero y hasta le copió el eslogan al estadounidense.
En fin, como ya se de dónde sacará la plata Piñera, quiero saber a quién o quiénes recurrirán los demás candidatos. ¿Es mucho pedir?. Digo, para saber a quien después se le devolverá el favor.
FOTO: csaavedra