Cuando el hombre no tiene nada que hacer, hace cualquier cosa por trascender.
Las estatuas y las imágenes repletan las iglesias y la gente ignorante de la Santa Palabra y del Concilio, se hinca, adora, llora y echa unas moneditas o algún billetito en las alcancías para el efecto. Todo está dispuesto: estatuas, inclinatorios, alcancías. Y NADIE DICE NADA NI ORIENTA.... y el "Santísimo" vacío, abandonado.
Bien habla Dios, a través de los profetas, contra los sacerdotes que desvían a la grey y que justifican los desvíos de la verdadera fe: adoración a Dios en el espíritu y en verdad. La adoración de estatuas es una aberración para Dios y usted lo sabe, aunque justifique con una y mil respuestas.
Cuando el hombre no tiene
Cuando el hombre no tiene nada que hacer, hace cualquier cosa por trascender.
Las estatuas y las imágenes repletan las iglesias y la gente ignorante de la Santa Palabra y del Concilio, se hinca, adora, llora y echa unas moneditas o algún billetito en las alcancías para el efecto. Todo está dispuesto: estatuas, inclinatorios, alcancías. Y NADIE DICE NADA NI ORIENTA.... y el "Santísimo" vacío, abandonado.
Bien habla Dios, a través de los profetas, contra los sacerdotes que desvían a la grey y que justifican los desvíos de la verdadera fe: adoración a Dios en el espíritu y en verdad. La adoración de estatuas es una aberración para Dios y usted lo sabe, aunque justifique con una y mil respuestas.
Esperamos ansiosos la Venida del Señor.
¡Ven Señor Jesús!