Por José Albuccó, académico de la Universidad Católica Silva Henríquez

Los sueños son parte de la construcción de la historia para muchas civilizaciones. Rapa Nui surge también de un sueño, el de Haumaka, (Consejero del Rey) quien, mientras duerme, viaja a una tierra que le permitirá a su gente emigrar después de las catástrofes sufridas. Un viaje semejante inició Martin Luther King cuando decía “I have a dream” o los movimientos que hoy luchan por sus derechos ciudadanos y culturales.

La historia relata, a través de muchas generaciones, que este sueño logró materializarse con la llegada de Ariki Henua Hotu a Matu’a a Rapa Nui, desarrollando una civilización que es considerada Patrimonio de la Humanidad desde 1995. Sin embargo, este camino no ha sido fácil, debido, en parte, a los conflictos propios al interior de cada grupo humano. Pero, sobre todo, a la explotación y segregación de esta cultura por parte de los europeos durante varios siglos, lo que llevó hasta la pérdida de su memoria escrita.

El Estado Chileno no ha estado alejado también de dicha segregación. Solo recordar que en 1917 se construyó el Leprosario en Rapa Nui, el cual funcionó hasta la década de los 90, falleciendo su último interno en 2013. Además, recién en la década de los 70 del siglo pasado los Rapa Nui fueron reconocidos como ciudadanos chilenos, siendo que celebramos, hacemos reportajes y documentales de su incorporación a territorio chileno desde 1888. La falta de políticas de Estado, hasta hoy, es aún patente y poco eficiente para lograr la valoración de su cultura. El Sueño por la No segregación aún está pendiente. No obstante, esta parte de la historia ha sido silenciada por el Estado Chileno.

Rapa Nui es uno de los museos más grandes e impresionantes del mundo. “La inscripción en esta lista confirma el excepcional valor universal de un sitio cultural o natural que merece ser protegido para el beneficio de toda la humanidad” es parte del texto rotulado en la placa que se encuentra en Ahu Tahai, el centro político más importante la cultura Rapa Nui.

Cada febrero, desde que fueron incorporados como ciudadanos chilenos, se celebra la Tapati Rapa Nui, uno de los encuentros culturales más importantes de la Polinesia. Donde se rescata y conserva la memoria y el pentagrama de su legado lingüístico, visual, musical, gastronómico y de ritos colectivos.

La identidad se construye desde el reconocimiento de la memoria y Rapa Nui lo hace cada año para no olvidar su sueño del origen.