[Crítica de cine] "Papillon": Grito de libertad

05 Noviembre 2018

Nueva versión de la historia real que inspiró exitoso filme de 1973.

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Papillon

Dirección: Michael Noer

Elenco: Charlie Hunnam, Rami Malek, EveHewson. EE.UU (2018)

Por Marcelo Macellari

En 1931, Henri “Papillon” Charrière (Charlie Hunnam), un ladrón de los bajos fondos parisinos, es acusado de un asesinato que no cometió y condenado a cadena perpetua en una colonia penal de la Guyana francesa. Decidido a recuperar su libertad, Papillon forma una inesperada alianza con un falsificador condenado, Louis Dega (Rami Malek), quien accederá a financiar su fuga a cambio de protección.

La sinopsis de la nueva versión de “Papillon” (2018), es casi exactamente la misma de la original, dirigida en 1973 por Franklin J. Schaffner, con guion de Dalton Trumbo y una banda sonora de Jerry Goldsmith ganadora del Oscar. El filme fue el vehículo perfecto para Steve McQueen y Dustin Hoffman, ambos en el peak de su carrera, convirtiéndose en un exitazo de taquilla.

Sin embargo, hay varias diferencias entre ambos filmes.  De partida, aquí no hay estrellas, sino dos protagonistas competentes y en ascenso (Hunnam y Malek) y el escepticismo setentero del filme de 1973, se transforma aquí en un canto a la libertad y una denuncia al maltrato carcelario.  Schaffner, quien venía de dirigir “El planeta de los simios” y “Patton”, es un cineasta físico, que privilegia la acción.

En este remake, basado más fielmente en las novelas autobiográficas de Henri Charriérre, “Papillon” y “Banco”, el realizador danés Michael Noer ofrece también acción, centrándose en los intentos de huida, pero prevalece el mensaje humanitario y el crudo retrato de la vida en prisión. Charlie Humman es una acertada elección como protagonista, mientras que Rami Malek resulta convincente, pero algo dado a los tics.  La relación entre los dos protagonistas, que transita del interés a la amistad, es el eje del filme.

Los 133 minutos de metraje pueden  ser algo excesivos,  pero el resultado final es más que aceptable, con su retrato de dos seres humanos quebrados que han intentado hasta lo imposible por sobrevivir.