Las islas fantasmas de Valparaíso

27 Enero 2020

Su ubicación a medio camino entre Rapa Nui y Juan Fernández lograría conectar en un solo bloque la zona económica exclusiva de nuestro país, haciéndola una de las más grandes del mundo. 

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Por Juan Araya Fernández

La Región de Valparaíso mira hacia el Océano Pacífico. Tenemos la buena fortuna de que Chile incluye dos islas de gran fama, Rapa Nui y Juan Fernández, además de las islas San Félix y San Ambrosio, cuya flora y fauna únicas generan enorme interés en el mundo científico. 

Lamentablemente la importancia de las islas de la región no se ha traducido en que se les trate siquiera en igualdad de condiciones con el resto de Chile, pero eso es harina de otro costal. 

Existen frente a la costa de Valparaíso “islas fantasmas” avistadas en contadas ocasiones, y que figuran en las cartas náuticas solo como un aviso, o una marca de peligro. La reina de ellas es la Isla Podestá, descubierta en 1879. 

La Isla Podestá

Mientras Chile, Perú y Bolivia se enfrentaban en el combate naval de Iquique, frente a las costas de Valparaíso el capitán Pinocchio, al mando del Barone Podestá, descubrió una isla ovalada con una circunferencia de tres cuartos de una milla​ a 870 millas náuticas (1.390 km) al oeste Valparaíso. 

La historia del capitán Pinocchio y su nave después de estos hechos es incierta. Solo se conoce que el Barone Podestá naufragó el 10 de septiembre 1889 a 90 kilómetros de Nueva York, después de enfrentar una terrible tormenta.

Posteriormente, tras no ser vista nuevamente, fue retirada la isla de las cartas náuticas. La Esmeralda la buscó seriamente durante 1957,  junto a otras “islas fantasmas”, sin que se haya obtenido resultado alguno.

Volvió a tener relevancia cuando Ecuador en 1967 hizo su declaración de soberanía sobre la Antártica, lo que ocasionó la protesta inmediata de Chile por la superposición de áreas que le corresponderían a nuestro país por la proyección de la isla Podestá. Para efectos de esta redacción se hicieron sendas consultas vía transparencia al instituto antártico y al MINREL, sin que se obtuviera respuesta sobre si esta información era o no real.

En la actualidad la isla se encuentra registrada en la Base de Datos del SHOA, sin que se señale que existe o no realmente. La justificación de ello se debe a que esta isla sería de gran relevancia en caso de existir; su ubicación a medio camino entre Rapa Nui y Juan Fernández lograría conectar en un solo bloque la zona económica exclusiva de nuestro país, haciéndola una de las más grandes del mundo.