Por Juan San Cristóbal

A las once de la mañana comenzó la sesión 109 de la Cámara de Diputados, la primera sesión en Sala luego del receso de dos semanas por las fiestas de fin de año. El primer punto en tabla es la modificación al guarismo 120, que establece el número de cupos en la Cámara Baja.

La votación no estuvo exenta de polémica, con intentos desde oposición por agrupar el quórum de tres quintos necesario para su aprobación (72 votos). Finalmente, en su segunda votación, la moción fue aprobada por 73 votos y 20 votos en contra.

El diputado del PC, Lautaro Carmona, destacó este proyecto como un primer paso para modificar el sistema binominal, y así también para eliminar trabas legislativas de la Constitución: “Más vale tarde que nunca. Espero sea un elemento que ayude a garantizar que en futuras elecciones, distintos sectores que buscan terminar con estos candados, como quórum calificados para impedir la voluntad de mayoría, para que ello ocurra hay un primer paso que es terminar con este guarismo”.

Por su parte, el diputado UDI Arturo Squella, anticipó el rechazo gremialista a este cambio, quien señaló que una propuesta de sistema representativo sólo ayuda al centralismo metropolitano. “Es el paso mediato para modificar uno de los sistemas electorales, pero aumentando el número de parlamentarios. Creo que no es correcto, de las versiones que se han conocido, se habla de aumento de parlamentarios principalmente en la Región Metropolitana. De catorce diputados nuevos, doce son de la Metropolitana, eso deberá ser considerado por los diputados de distintas regiones del país”.

Este proyecto es el acuerdo conseguido entre Democracia Cristiana y Renovación Nacional, que hoy cuenta con un amplio apoyo en la Nueva Mayoría y contempla un cambio al número de integrantes del Parlamento. Se esperaba una votación a favor, que permitiera un avance de este proyecto para que en el próximo período legislativo, la Nueva Mayoría agilice su tramitación y proponga una reforma mayor al sistema electoral binominal.