Por Claudio Medrano

Este miércoles, los diputados aprobaron y despacharon el proyecto de Reforma Tributaria.

La discusión, que por meses se analizó en el parlamento, está a punto de ser despachada y convertida en ley, por lo que no se toparía con el debate presupuestario.

La discusión de la Sala se inició  a las 10:30 horas, y se extendió hasta cerca de las 21:00 horas, cuando concluyó la votación del último grupo de modificaciones (los más de 140 cambios verificados en el segundo trámite fueron agrupados en 16 áreas temáticas para facilitar su tratamiento).

Uno de los temas que provocó mayores reparos  y que presentó una de las votaciones más ajustadas, incluyendo votos del oficialismo, fue la introducción de parte del Senado de un nuevo artículo transitorio que permite, a partir del 1 de enero de 2015 y hasta el 31 de diciembre del mismo año, un sistema voluntario y extraordinario de declaración de bienes o rentas que se encuentren en el extranjero, con un impuesto que alcanza el 8 por ciento.

Pese a ello,  el gobierno cumplió con los plazos establecidos en su cronograma de trabajo el cual contemplaba tener aprobada la Reforma durante las dos primeras semanas de septiembre para que el texto fuera ley durante el mismo mes y así incluir

Los recaudos proveniente del alza impositiva en la ley de Presupuestos que debe ingresar al Congreso antes de fin de mes.

En conversación con Radio Universidad de Chile, el presidente de la comisión de Hacienda de la Cámara, Pablo Lorenzini (DC) evaluó el proyecto aprobado luego de cuantiosas modificaciones trabajadas por la clase política en el comentado Protocolo de Acuerdo, que sellaron los dos grandes conglomerados del país.

A juicio del diputado, la Reforma es un gran proyecto. Argumento defendido pese a que asegura que existen varios puntos que mejorar.

Entre ellos, destaca la participación de los ingresos en regiones, modificaciones en beneficio de las Pyme y subir el impuesto para el retorno de capitales, hoy fijado en un ocho por ciento.

Lorenzini explicó que estas diferencias se zanjarán por separado. Algunas, como los beneficios a las pequeñas Pyme en mesas de diálogo con Hacienda. Respecto de los mayores ingresos para las regiones, el diputado aseguró que el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, se comprometió a resolverlo.

Para el falangista, que en innumerables ocasiones ha manifestado sus reparos frente a lógicas puntuales del documento, la reforma avanza, pero no es todo lo revolucionaria que pudo ser.

Calificándola con notas del uno al siete, la iniciativa de ley alcanzaría un cinco, aseguró: “Cumple con los tres requisitos, la pregunta es cuánto cumple. De uno  siete, se elimina el FUT, pero queda futito. Se elimina la renta atribuida, pero queda atribuidita. En términos de igualdad se mejora, se cumple, pero no en un siete”.

Lorenzini insistió en la dificultad que representa en Chile “tocar los poderes económicos”. A su juicio, falta mucho camino para lograrlo.

“Se negoció con los grandes empresarios, con sus expertos, se avanzó –porque esta es una gran reforma- pero llegamos a un cinco mucho más que regular, pero avanzamos”, dijo.

Discusión en Sala 

La discusión fue extensa. Todos los parlamentarios expusieron sus acuerdos y reparos al proyecto.

Algunos de los antecedentes de la discusión recaían en el cuestionado Protocolo de Acuerdo firmado por representantes de todas las bancadas. Instancia que permitió que la UDI se allanara en apoyar el documento, pese al categórico rechazo original.

El diputado gremialista, Patricio Melero, recalcó que esta iniciativa demuestra que la UDI está dispuesta a avanzar en los cambios “la UDI pone en usted y la Presidenta un voto de confianza, ¡que nunca se diga más que la UDI le niega la sal y el agua!, que nunca se diga que la UDI no colaboró, que no cumplió sus compromisos, porque los cumple. Ahí está la plata, ahí están los recursos, ahora administren”, agregó.

Por su parte, el diputado de la DC, Matías Walker sentenció que el gran derrotado con esta Reforma es el ex presidente de la República, Sebastián Piñera, “los únicos que reclaman contra esta Reforma, los únicos que reclaman contra el acuerdo son el ex ministro de Hacienda, Felipe Larraín y la senadora Lily Pérez, es decir, quienes se opusieron a este acuerdo son las personas más cercanas al ex presidente Sebastián Piñera”, sostuvo el parlamentario.

En tanto, el diputado independiente Gaspar Rivas, puso el énfasis en aquellos aspectos que fueron modificados o que simplemente no se trataron, “yo hablé de rebajar el IVA, no se oye padre como se dice en vulgar chileno; pedí que se aumentara la tasa que pagan las grandes empresas mineras del cobre como impuesto específico, no se oye padre; no se les tocó un solo pelo a las grandes mineras del cobre en el país en esta Reforma; el FUT que era parte del corazón de la Reforma, sigue estando presente”, detalló Rivas.

La jornada de trabajo en sala se dividió en dos bloques de 10 de la mañana a las 14 horas y de 15.30 horas hasta cerca de las 19.00 horas para tratar el proyecto. La votación culminó pasadas las 21.oo horas de este miércoles.

Cabe recordar que los jefes de bancada de diputados de la Nueva Mayoría se comprometieron ante el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, a que el proyecto sea despachado esta semana desde la Sala para que se convierta en ley dentro de septiembre.