Por Boris Kúleba

Hace unos pocos meses, el actual intendente de Valparaíso, Jorge Martínez, anunciaba en las páginas del Mercurio de Valparaíso una “ofensiva contra la corrupción”, en relación a los constantes episodios de desvíos de dineros en el Gobierno Regional.

Desde hace varios años, El Mercurio de Valparaíso y la red de millonarios de derecha locales agrupados en la Cámara Regional de Comercio, primero, y en la Fundación Piensa, después, habían intentado posicionar la figura instrumental de Martínez, instalándolo en cuanto directorio hubiese, como su candidato para ocupar el cargo de intendente.

De la mano, y simultáneamente, la Fundación Piensa (de la que fue director antes de asumir su cargo público) lanzaba su portal “Piensa Transparente”, con el fin de hacer un seguimiento ciudadano a todos los proyectos financiados por el Fondo Nacional de Desarrollo regional (FNDR), georreferenciando a los ejecutores (ONGS, organizaciones comunitarias, juntas de vecinos, etc.), y exponiéndolos públicamente de manera “transparente”.

En los proyectos del 6% del FNDR es en donde se producían los fraudes, generalmente para desviar fondos a las campañas políticas, por algún core o alguna concejala que postulaban proyectos fantasmas con organizaciones que usaban de palos blancos (las que muchas veces ni se enteraban). Entonces, ahora uno en esta plataforma puede encontrar en dónde se encuentra cada organización que se ha adjudicado proyectos, cuánta plata se les asignó y cuándo fue. Así, como si fueran sospechosos de algo y haya que vigilarlos, como si postular fuera corrupto y las organizaciones sean sospechosas por el mero hecho de adjudicarse un proyecto ¿con qué objetivo?

Días antes, en el mismo Mercurio de Valparaíso la Fundación Piensa había anunciado el lanzamiento del portal indicando un dato que pasó casi desapercibido: el respaldo de Atlas Network, entidad estadounidense que, en palabras de Piensa, “promueve la cultura de rendición de cuentas a nivel mundial”. En la web de Piensa Transparente, Atlas Network aparece como patrocinador y en su propio portal, en junio del 2017, anunciaban con orgullo su incorporación a esta red.

Pero ¿quiénes son Atlas Network? Basta una simple búsqueda en internet para hacerse una idea: son considerados "Libertarios de Ultraderecha" y se dedican a financiar a thinks tanks para desacreditar movimientos sociales y gobiernos de izquierda en Latinoamérica. Han estado en el golpe de Estado en Honduras y en la caída de Dilma Russeff en Brasil y Cristina Fernández en Argentina. Y ahora están metidos en nuestras propias narices porteñas a través del grupo paraempresarial (que ya instaló a un intendente) Fundación Piensa. Y muestran a nuestras propias organizaciones sociales como objeto de sospecha.

Uno podrá pensar ya, le están poniendo mucho color ¿qué van a derrocar en Valparaíso? ¿a Sharp? Bueno, basta con echar una mirada a su sitio web y ver qué thinks tanks posee en Chile para comenzar a tomarlos en serio, éste es el listado:

• CEP – Centro de Estudios Públicos
• Centro De Investigación de la Empresa
• Círculo Acton Chile
• Ciudadano Austral
• Fundación Chile Intercultural
• Fundación Leadership Institute Chile
• Fundación P!Ensa
• Fundación para el Progreso
• Instituto de Estudios de la Sociedad
• Instituto Res Pública
• Libertad Y Desarrollo

No está de más recordar el rol que encuestas como la CEP (encabezando esta lista) tuvo en el triunfo de Piñera (¿recuerdan? Decía que Beatriz Sánchez obtendría un 8% de votos y que Piñera arrasaría) o la campaña de terror que decía que nos convertiríamos en Chilezuela sin él; ni la cantidad de institutos y fundaciones en las que participan magnates como nuestro conocido Nicolás Ibáñez o la familia Von Appen (¿todos conocemos la camiseta de Wanderers?); y a estas alturas asumo que ya todos conocemos a los dueños de Fundación Piensa y el rol que han tenido en el destino de Valparaíso para concluir que Atlas Network ha elegido a nuestra ciudad como un objetivo.

No es casualidad, entonces, que El Mercurio de Valparaíso y la Cámara regional de Comercio haya estado durante años financiando una campaña para instalar a Jorge Martínez (exdirector de Piensa) como su intendente, ni que la base de datos de la Intendencia ahora sea utilizada por la misma Fundación Piensa en un portal para “perseguir” a las organizaciones sociales que se adjudican proyectos FNDR, ni mucho menos que el TPS de la familia Von Appen haya forzado el conflicto con sus trabajadores eventuales para desvirtuar las demandas sociales y ¡oh! promoverlas en sus medios como violencia y barricadas.

Esto va más allá de la codicia y la inhumanidad de millonarios como Ibáñez y los Von Appen. Tiene que ver con que hay una red estadounidense que tiene como objetivo desestabilizar movimientos sociales operando impunemente en Valparaíso, creando sus propias campañas camufladas de ciudadanas (¿recuerdan que Mar para Valparaíso comenzó cuando falló el plan de TPS para ganar la licitación del T2? ¿o que Martínez fue uno de los fundadores del hoy exiliado Pacto La Matriz? ¿o ese club de urbanistas, Metropolítica, vinculado a Piensa y que hoy tiene a Poduje moldeando el borde costero a su pinta?) y más encima están instalando a sus propias autoridades.

Lo peor de todo es que, al parecer, los recursos de sus cómplices locales son ilimitados.

*Esta nota fue publicada originalmente en la sección "Cartas desde el Tablón", del portal Movimiento 15 de Agosto