A 12 años de la inauguración del Troncal Sur, vimos con alegría que una carretera podría conectar de mejor manera nuestra provincia, uniendo Viña del Mar, Quilpué, Villa Alemana y Limache. Alegre estaban las comunas de Quilpué y Villa Alemana, las comunas más importantes de la provincia, que cuentan con mayor cantidad de habitantes y en donde la mayor cantidad de personas que residen trabajan en Valparaíso y Viña del Mar. Por lo tanto, mejorar la conectividad era algo que estaba al debe.

Con el paso de los años, vimos cómo esta carretera fue tomando protagonismo y fue aumentando su flujo, pero con tristeza vimos cómo Quilpué y Villa Alemana, en alguna medida, en estos 12 años no se han sabido adaptar a esta carretera.

¿Por qué digo esto? Porque esta autopista pasa por el sector sur de ambas comunas y lamentablemente las personas tienen un acceso deficiente para poder conectarse con ella. A 12 años de la inauguración del Troncal Sur, hemos visto cómo las dos principales vías de acceso que tiene Quilpué, es por Villa Olímpica y por el sector del eje Marga-Marga. Sectores donde no hemos observado ninguna mejora.

Los quilpueínos que ocupan Troncal Sur, ven como en la mañana es una vía de acceso que colapsa y luego en el retorno se corre la misma suerte. A 12 años, es una calle que sigue teniendo solo una vía para cada sentido, con un flujo grande de automóviles por la creciente población de Los Pinos, el sector de Teniente Serrano y Las Rozas. Sectores que han crecido en la población exponencialmente. Por lo tanto, hubiéramos esperado que a 12 años de esta gran inauguración, hubiéramos tenido una calle mucho más amplía, mucho más expedita y acorde a las demandas de Quilpué y de las personas que utilizan el Troncal Sur.

Por otro lado, vemos que para ocupar la salida de Villa Olímpica con dirección al centro, es un zigzagueo continuo y confuso. Para quien no conoce el sector, simplemente termina siendo un laberinto. Nosotros hubiésemos esperado que ambas salidas del Troncal Sur, tanto el eje Marga-Marga, como la salida de Villa Olímpica, a 12 años de esta inauguración hubieran sido mejorados para poder generar una real alternativa para que los habitantes de Quilpué usen esa vía y puedan mejorar la conectividad con Viña del Mar y Valparaíso.

Tanto Villa Alemana como Quilpué están al debe. Siguen siendo vitrinas de una estupenda carretera que pasa por fuera de la ciudad y que en el fondo, no supieron adaptarse ni sacarle provecho a este proyecto, porque siguen estando los centros colapsados y muchos habitantes de estas comunas no lo ven como una alternativa real de conexión con la costa.

Otra vía que no conecta directamente con el Troncal Sur, pero está a 500 metros aproximadamente, es Ramón Ángel Jara. Es una vía que conecta directamente con Belloto, que podría resultar ser una real solución para las personas que van a Santiago o a Valparaíso por Troncal Sur. Aquí vemos una demanda de vecinos hace muchos años, donde esta calle no ha entrado nunca en ningún proyecto para arreglar su pavimentación y poder así convertirse en una alternativa real para descongestionar el centro.

Todo esto, mejorar Marga-Marga a través de una ampliación de dos pistas por sentido, mejorar la señalética y mejorar las salidas, tiene como objetivo quitarle vehículos al centro y dejar de ser el embudo que suele ser para generar otras vías de conexión.

Podemos observar con alegría cómo nuestras comunas han crecido. En estos últimos 12 años, Quilpué y Villa Alemana han tenido un crecimiento exponencial de viviendas, dado que tenemos una calidad de vida valorada por las personas de la región. No es casual que muchas familias de Viña del Mar o Valparaíso opten por venir a vivir a Quilpué por su calidad de vida y ambiente.

En lo personal, hace 18 años que llegué a Quilpué a vivir a Belloto y valoré profundamente esta calidad de vida que las personas hoy cuentan y es nuestro deber cuidarla, para mantener este valor agregado en nuestro diario vivir.