Migrantes en Chile: Testimonios de vida en la tierra de las oportunidades

Migrantes en Chile: Testimonios de vida en la tierra de las oportunidades

12 Mayo 2015

Un mismo origen, un mismo destino, pero realidades opuestas encontramos en esta conversación con dos migrantes peruanos que llegaron a Chile en busca de mejores oportunidades.

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Por Joaquín Valenzuela

En las últimas décadas la cantidad de inmigrantes peruanos en nuestro país ha crecido considerablemente, superando los 185 mil en el último Censo. Pero más allá de las cifras, las situaciones actuales y los motivos de la llegada de cada migrante, no son homogéneas, y las “clases sociales” dentro de esta comunidad están tan marcadas, como en la sociedad chilena misma.

Conversamos con Paola y Jimmy, dos peruanos radicados en Chile hace más de cinco años, quienes cuentan su vida como inmigrantes desde realidades bastante diferentes, pero que convergen en un punto en común, “mejores expectativas de vida”.

“Allá el dinero no alcanzaba, tuve que abandonar a mi familia debido a mi situación económica” confiesa Paula, quien trabaja vendiendo jugo naranjas en su carro a la salida del metro Los Leones en Santiago. En tanto, Jimmy, con una taza de café desde una terraza en los barrios centrales de Santiago, nos explicó que “apenas terminé mi carrera, decidí irme para escapar de una relación amorosa enferma que llevaba en Lima, y como me negaron la visa a Estados Unidos, entonces me vine para Chile”.

Paula tiene 34 años, llegó a Chile en 2008 y las cosas no le fueron fáciles. “Cuando llegué estaba completamente sola, mi hermano todavía no se venía, los primeros días fueron muy difíciles, no conocía a nadie y gasté lo poco que me traje en comida”. Jimmy tiene 29 años, llegó a Chile en 2009, es publicista y a diferencia de Paula, las cosas le fueron bastante fáciles, “yo tenía un primo acá, cuando llegué él me puso en contacto con la embajada peruana y trabajé para ellos durante 8 meses”.

Pese a la opuesta realidad que vivieron Jimmy y Paola en sus últimos días en Perú y sus primeros en Chile, los dos parecen haberse quedado por la misma razón. “La moneda chilena es cinco veces mejor que la peruana, por eso me quedé acá” señaló Paula, mientras que Jimmy afirmó que “en Chile la economía es muy estable y es más fácil encontrar trabajo… En Perú hay tanta gente y tan pocos puestos”.

Desde la oficina y desde la calle

Mientras Jimmy trabaja en su oficina de publicidad, Paola exprime naranjas en el centro, sin embargo, los dos tienen más en común de lo que creen, ambos se quedaron en Chile porque éste fue una plataforma económica, y les mejoró la calidad de vida.

“En Santiago estás a pocas estaciones de metro de cualquier parte, en Lima a veces tenías que estar 2 o más horas en una micro para ir a un carrete” cuenta Jimmy, mientras que Paola nos dice que “yo pensaba venir a Chile trabajar un tiempo y volver al Perú, pero cuando volví me di cuenta que mi situación allá estaba mucho pero que acá, así que decidí regresarme, y ahora no pienso volver”.

Los testimonios de Paola y Jimmy dejan en evidencia la transversalidad de clases sociales en los incentivos económicos que Chile ofrece a los extranjeros, pese a que sus realidades puedan ser diametralmente opuestas.