Ministro de Medioambiente reconoce “graves daños” por derrame de petróleo en Quintero

Ministro de Medioambiente reconoce “graves daños” por derrame de petróleo en Quintero

29 Septiembre 2014
El accidente que se registró el miércoles pasado, cuando la embarcación LR Mimosa se encontraba descargando combustible en los estanques de la refinería Enap, sigue encendiendo las luces de alerta.
Radio U. de Chile >
authenticated user

“Hemos sufrido un accidente que ha ocasionado graves daños ambientales”, aseguró el ministro de Medioambiente, Pablo Badenier. Esto, luego de su visita a Quintero por el derrame de petróleo.

Esta emergencia  que contemplaría  3 mil litros del combustible, tiene en la mira la labor de Enap.

El ministro manifestó que “los trabajos se extenderán hasta que la situación esté superada totalmente, por lo que han solicitado a Enap que no escatime en recursos para terminar totalmente con la emergencia, lo antes posible”. Además, informó de la solicitud de refuerzo “en el programa de reparación para poder recolectar el petróleo que se encuentra en las playas y en las columnas de agua”.

“Que aún no es posible cuantificar el daño ambiental. Nosotros estamos en la etapa de contención de esta emergencia, de poder realizar la limpieza de playa de la columna de agua para retirar el petróleo que pueda ser retirado y en paralelo los Servicios Públicos están recopilando los antecedentes que permitan cuantificar el daño, pero también emprender acciones administrativas y eventualmente judiciales de acuerdo a lo que cada Servicio Público tenga competencia”, indicó el secretario de Estado.

Durante la visita a la zona se reunió con las organizaciones de pescadores artesanales de Horcón, Ventanas y Quintero, que se vieron afectadas por el derrame.

Horas después de lo sucedido los propios trabajadores advertían de la confusión en los antecedentes entregados por ENAP. En un comunicado, el Movimiento Comunidades por el Derecho a la Vida y los sindicatos de pescadores de las caletas Ventanas y Horcón, manifestaron que ésta era “una nueva demostración de la irresponsabilidad con que un número importante de empresas instaladas en el complejo industrial de Ventanas realizan sus operaciones, sin la adopción de las mínimas medidas que permitan evitar el dañar el medio ambiente, la salud y calidad de vida de sus habitantes, así como la oportunidad de desarrollar otras actividades productivas locales”.

Varios actores ponen en el debate este hecho con la grave situación ambiental que se observa en el sector de Quintero y Puchuncaví. El secretario de Estado reconoció que “es una zona muy compleja que ha acumulado daño producto de las empresas y su ubicación”.

Mientras ENAP continúa con los sobrevuelos de inspección, un equipo de científicos de la Universidad de Valparaíso se sumó a los operativos de rescate de aves afectadas. Liderados por el doctor en Ciencias Biológicas Gerardo Leighton, advirtieron que aún están pendientes actividades importantes como el monitoreo a la matriz de sedimento y al agua, entre otras.

El académico Gerardo Leighton indicó en conversación con Radio Universidad de Chile que además existen otros operativos de rescate dirigidos por ONGs, instituciones del gobierno como el Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca), Servicio Agrícola y Ganadero (SAG ) y personas que monitorean el lugar buscando ayudar a las aves que se han visto afectadas por este derrame de petróleo.

“Nosotros hemos estado siendo un poco más exhaustivos y queremos continuar por varios días más, porque no es una mortandad inmediata, porque las aves no mueren en un momento, sino que pueden aparecer en días posteriores algunos ejemplares. Por eso es importante salvar todo lo que se pueda, estar atentos a ejemplares que están en condiciones que se van debilitando”, explicó.

El biólogo dijo que generaron una cadena de ayuda que incluye ornitólogos, equipos para poder capturar las aves en jaulas especiales, atención veterinaria en el lugar y también hospitalizaciones, si el daño es mayor. Cuentan para ello con clínicas veterinarias que se encuentran aportando en este operativo de rescate de aves, además de centros de rehabilitación que deben ser autorizados por el SAG, según lo dicta el protocolo.