El pasado sábado zarpó de Talcahuano con rumbo sur austral, el AGS “Cabo de Hornos”, buque científico a cargo de la Armada, para iniciar un segundo crucero biológico oceanográfico, desde que terminó su construcción y equipamiento en abril último. Vale acreditar que la iniciativa se originó hace 6 años en el proyecto ”Medusa” mediante estudios y aportes de varias instituciones relacionadas con ciencias y tecnologías del mar. Por ejemplo, el almirante Rodolfo Codina, comandante en jefe de la Armada, respaldó entonces la alternativa de construir en Chile una nave de investigación multipropósito. El diseño, según las máximas exigencias internacionales en la especialidad, se contrató a la firma noruega Skipsteknik, siendo desarrollado finalmente en Asmar, Talcahuano.

Sin embargo, “finalmente” no fue posible celebrar el bautizo náutico que debía asumir la Presidenta Michelle Bachelet el 10 de febrero de 2010, por cuanto el tsunami sacó el buque del astillero, quedando varado en una playa de Talcahuano, con daños subsanables en virtud del seguro marítimo.  Las reparaciones y el equipamiento técnico y científico, supervisado por las agencias clasificadoras, se completó al comienzo del 2013, incluyendo las pruebas definitivas. La inversión del Estado asciende a 67 millones de dólares, y el nombre implica una proyección de la soberanía de Chile en latitudes australes.

De esta manera, durante 20 días de julio se embarcaron los investigadores de varias universidades que, junto a la dotación naval, asumieron las tareas del primer crucero  del AGS “Cabo de Hornos”, enfocado en la biología marina de los fiordos y canales de la zona austral. 

Oceanografía  pesquera

El nuevo crucero atenderá en agosto el proyecto de la Subsecretaría de Pesca, con ejecución a cargo del Instituto de Fomento Pesquero, para evaluar los factores del ecosistema marino que determinan la biomasa total y la población desovante de tres especies de merluza en aguas exteriores desde Chiloé a Magallanes, diferentes a la especie más conocida que se captura frente al litoral central de Chile.

La primera parte abarcará 43 tramos de navegación hacia alta mar, con mediciones y muestras entre 100 y 600 metros de profundidad, donde se distribuyen la merluza austral y la merluza de cola, bien cotizadas en el consumo.  En la segunda quincena de agosto el buque deberá cubrir 49 tramos de muestreo, perpendiculares a la costa, entre 100 y 1.000 metros de profundidad, el  hábitat de la merluza de tres aletas. 

En la rutina que asume el personal embarcado  del Instituto de Fomento Pesquero,  la evaluación hidroacústica de las agregaciones de peces, mediante sonar, se realiza en horario nocturno, dejando las faenas de pesca exploratoria como tarea diurna. En ambos casos, una ventaja del AGS “Cabo de Hornos” es su característica de buque totalmente silencioso, en cuanto fue construido y equipado para evitar toda clase de vibraciones detectables por los peces.

La novedad en un buque científico operado con dotación de la Armada será la maniobra con red de arrastre y recolección de muestras de merluzas australes. La innovación fue técnicamente programada mediante el contrato ocasional de un Patrón de Pesca y seis tripulantes del rubro, bajo supervisión del IFOP.

Alvaro  Saavedra, jefe científico del proyecto con 10 miembros del IFOP a bordo, declara: “Es una suerte y un honor participar en este avance histórico de la oceanografía pesquera, y liderar un excelente equipo de trabajo. A diferencia de cruceros anteriores que se debieron efectuar con buques pesqueros en aguas australes, ahora disponemos de una nave científica de última generación utilizable en la evaluación de los recursos hidrobiológicos.”

Pablo Galilea, Subsecretario de Pesca, organismo del Ministerio de Economía que financia el proyecto de investigación, confirmó la calidad operacional del AGS “Cabo de Hornos”:

“Es uno de los cinco barcos más modernos del mundo en su categoría. El gran cambio de la actual Ley de Pesca y Acuicultura plantea la sustentabilidad de los recursos, ante lo cual es necesario tener la mejor información que permita tomar las decisiones correctas en la administración del sector.”

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