Palacio Subercaseaux admite grafitis chilenos

Palacio Subercaseaux admite grafitis chilenos

25 Febrero 2012

El problema está a la vista en el frontis del ex Palacio Subercaseaux, como muestra la imagen, y tal vez sea la forma con que los artistas callejeros intentan atenuar los efectos de la explosión que hace 5 años derrumbó el inmueble más emblemático y rentable de calle Serrano.

Eduardo Reyes >
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Por Eduardo Reyes F. 

La multa de $ 80.000 y una posible sanción de la ley de extranjería en contra del turista suizo que estampó un grafito mural de cuatro letras en Valparaíso, podría constituir una injusticia, en tanto faltan sanciones a los numerosos grafiteros porteños que permanecen anónimos.

El problema está a la vista en el frontis del ex Palacio Subercaseaux, como muestra la imagen, y tal vez sea la forma con que los artistas callejeros intentan atenuar los efectos de la explosión que hace 5 años derrumbó el inmueble más emblemático y rentable de calle Serrano.

Aref Cosma, dirigente del comercio, fotógrafo de nivel internacional, Hijo Ilustre de Valparaíso, recuerda que el edificio fue construido a fines del siglo XIX, y que habiendo resistido varios terremotos, incluido el de 1906, se mantenía impecable, albergando 22 familias y 15 locales comerciales. “No hubo víctimas humanas es este lado de la calle, pero las pérdidas económicas y el desempleo en ningún caso han sido bien compensados en la responsabilidad ya investigada por el accidente del 2007.”

De acuerdo con una recomendación de UNESCO, el Programa de Recuperación y Desarrollo de Valparaíso (Plan BID) adquirió los restos incendiados del edificio Subercaseaux en $ 530 millones y traspasó la propiedad al Municipio de Valparaíso para su gestión patrimonial.

En su estado actual, detrás de los muros grafiteados solo existe un desmalezamiento del sitio eriazo, lo cual al menos previene el desarrollo de una plaga de roedores. La puerta de rejas tiene un letrero que dice ”El Refugio.”

No se ha difundido hasta hoy algún proyecto de rehabilitación del ex Palacio Subercaseaux. Ojalá que sea algo más creativo que los típicos “patios de comida”. El ejemplo estimulante se realizó con el edificio Cousiño, comprado igualmente a través del Plan BID, pero cuya inversión restauradora se debe a la iniciativa del DUOC-Valparaíso.

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