Prepárate para el verano: Los verdaderos y falsos de las dietas

11 Octubre 2016

Cuando hablamos de alimentación pareciese ser que todos son nutricionistas. Así como todos comen, todos opinan haciendo que a veces sea difícil distinguir entre ciencia y mitología popular. 

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Por Bárbara Barrera, nutricionista Red de Salud La Araucana

Mito: Comer grasa engorda. Si usted quiere perder peso, DEBE eliminar la grasa de su alimentación.

Realidad: Suena lógico pensar que el consumo de grasas engorda. Pero no es el caso. Los efectos de engorde de la grasa  dietaria dependen totalmente del contexto y tipo de grasa. Alimentos altos en grasa como aceitunas, palta, frutos secos y aceite de oliva son saludables y merecen ser incluidos en un plan de alimentación. La elección de las grasas adecuadas puede ayudar a mantener la sensación de saciedad por períodos más largos de tiempo. Combinarlo con una fuente de proteína magra, también es ideal para combatir la ansiedad. De hecho, cantidades moderadas de grasa en la dieta han demostrado ser más beneficiosas para la pérdida de peso que las dietas bajas en grasas.

Mito: Todas las calorías son iguales, sin importar su procedencia.

Realidad: Simplemente falso. Los diferentes alimentos usan distintas vías metabólicas y tienen efectos diferentes sobre el gasto metabólico, hormonas y centros cerebrales que regulan el apetito. Una dieta alta en proteínas, por ejemplo, puede aumentar la tasa metabólica en 80 a 100 calorías por día y reducir significativamente el apetito

Un vaso de bebida azucarada y una manzana grande tienen la misma cantidad de calorías, sin embargo ¿Cree alguien que son iguales? Mientras el refresco se absorberá en 1-2 horas aumentando el azúcar e insulina de la sangre de forma brusca, la manzana demorará más del doble en liberar su energía y lo hará de forma paulatina, induciendo saciedad, aportando fibra, vitaminas y enzimas.

Mito: La sal de mar tiene menos sodio.

Realidad: Lamentablemente las sales gourmet, ya sea rosada, de mar, del himalaya u otra, tienen aproximadamente la misma cantidad de sodio que la sal de mesa.  La diferencia está en que no suelen tener aditivos como aluminato y tienen más cantidad de minerales en cantidades muy pequeñas. Una buena estrategia para agregar sabor a las comidas, sin exceso de sodio es usar condimentos como pimienta, hierbas y especias. Además, más de la mitad de la ingesta total de sal viene de los alimentos procesados. Simplemente reduciendo su consumo haremos un gran cambio.

Mito: Tomar más agua le hará bajar de peso.

Realidad: No hay duda de que el agua es vital para nuestro cuerpo, pero realmente no nos hará bajar de peso. Si tomamos agua para evitar el consumo de bebidas azucaradas, sin duda eso nos puede ayudar a perder peso. Sin embargo, la adición de más agua a su dieta, sin cambiar nada más, no hace ninguna diferencia en la reducción de peso.