Se mantiene Alerta Roja en Valparaíso por incendio “La Foresta” en Placilla

Se mantiene Alerta Roja en Valparaíso por incendio “La Foresta” en Placilla

09 Octubre 2019

El control del incendio forestal “La Foresta” ha sido complejo debido al tiempo atmosférico vigente.

El Martutino >
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Con seis brigadas, siete técnicos, un puesto de mando móvil, seis camiones aljibe, tres helicópteros y tres aviones cisterna, la Corporación Nacional Forestal (CONAF) combate hoy el incendio forestal denominado “La Foresta”, que desde el martes 8 de octubre mantiene con Alerta Roja a la comuna de Valparaíso.

Así lo dio a conocer el director regional del organismo, Sandro Bruzzone, quien explicó que el siniestro -situado en la localidad de Placilla de Peñuelas, cerca del tranque La Luz- ha consumido una superficie preliminar de 39.8 hectáreas de pastizal, matorral, pino, eucalipto y desecho forestal.

Agregó que la emergencia forestal -que ayer amenazó con propagarse hacia el conjunto habitacional del condominio Bosques de Curauma- permanece “con actividad, pero está con una baja intensidad”, aunque todavía “se mantienen algunos puntos calientes dentro del perímetro”.  

Bajo el escenario de tiempo atmosférico que rige actualmente en la región de Valparaíso, propicio para la propagación de incendios forestales, Bruzzone pidió a la comunidad “ser estrictamente cuidadosos en el uso del fuego en todas sus formas”, ya sea en cuanto al manejo directo o a través de elementos que puedan generar chispas, tales como esmeriles, sopletes y otros.

En ese contexto, el director regional de CONAF advirtió que en la zona, incluyendo el territorio insular, hasta el 30 de marzo, está prohibido el uso del fuego para la eliminación de desechos agrícolas y forestales. “La vulneración de esta normativa puede constituir delito, y ello conlleva cárcel”, acotó.

De acuerdo al análisis técnico de la Corporación, el control del incendio forestal “La Foresta” ha sido complejo debido al tiempo atmosférico vigente (altas temperaturas, baja humedad relativa y fuertes vientos); el gran acopio de desecho forestal en la zona, que dificulta la construcción de líneas de cortafuego y el desplazamiento de vehículos de emergencia; y la topografía abrupta del sector, que permitió, al inicio del incidente, una rápida propagación del fuego y pavezas.