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Desde hace 10 años que el artista Félix Blume, ingeniero en Audio de formación, trabaja en la realización de películas y documentales. De forma paralela, desarrolla proyectos personales vinculados al espacio público. Su interés por las ciudades e identidades sonoras es el foco principal de sus residencias, que se inspiran en la investigación de la globalización y sus efectos en lo cotidiano, donde el ambiente se vuelve cada vez más uniforme, y los sonidos específicos de una ciudad van desapareciendo o cambiando.

Fue bajo esa misma lógica es que el año 2015 en Valparaíso, y como parte del Festival de Arte Sonoro Tsonami [9], propuso a un grupo de personas con discapacidad visual, definir juntos esos sonidos. Asegura que se trató de un intercambio: él les enseñaba a grabar con sus micrófonos y ellos a escuchar la ciudad a ciegas. Aquella instancia fue el punto de partida para los  proyectos siguientes, con los cuales ha recorrido la particular vinculación que tienen las personas no videntes con el sonido y la ciudad.  

Por ellos, explica que “esta materia común que es mi trabajo y mi pasión, tiene para ello/as un sentido mucho más importante que para los que podemos ver. No trabajo con ellos/as por su discapacidad, más bien por su especificidad, su relación peculiar con el sonido. No hago proyectos ‘inclusivos’ en los cuales se trataría de incluir lo/as en algo ya existente. La idea es dar vuelta los roles para poder compartir sus sensibilidades. Vivimos un mundo visual, en el cual el oído muy pocas veces está en primer plano, aquí proponemos aprender a escuchar, y que sean las personas no videntes que nos enseñen”.

Residencia en Valparaíso

Durante el mes de Agosto, Félix comenzó  un taller de grabación de sonido con un grupo de personas no videntes y de baja visión en el CENTEX. El resultado estuvo ligado con la exposición “Por estas y otras razones: Centex celebrará a Violeta Parra”. Los participantes del taller se convirtieron en ingenieros de audio y grabaron las voces de personas voluntarias leyendo sus textos, letras de canciones o poesías. Las grabaciones tuvieron la especificidad de hacerse a media voz y se presentaron en unos frascos vacíos que guardaron esas palabras, invitando el oyente a destaparlos y acercar su oreja al susurro encerrado.  

La instalación tuvo por nombre A Media Voz y terminó hace unos días, pero los frascos van a seguir en el próximo ciclo expositivo del CENTEX, que se inaugura el próximo  20 de octubre a las 19hrs.

“Pensamos juntos con los participantes del taller cómo cambiar la propuesta, partiendo de esos mismos frascos. Varios tenían el interés de grabar sonidos, más allá de voces. Cada uno de los participantes grabó sonidos de su cotidiano, algo que les parecía representativo de su realidad sonora. El título se cambió a El Placer de Oír, decidido y votado en conjunto durante el taller”, explica Félix, quien agrega que los sonidos son muy diversos, “se pueden escuchar varios sonidos de aves y animales, sonidos típicos de las calles de Valparaíso como el sapo de las micros o vendedores callejeros, sonidos más específicos a la ceguera como el bastón, un computador parlante o una máquina de escribir braille, sonidos de sus casas o instrumentos musicales”. (Un ejemplo: https://soundcloud.com/amediavoz/sapo-de-micro-andres [10])

Además de esta nueva propuesta sonora,  el sábado 21 de Octubre se  realizará  la inauguración de la instalación “Escalera Sonora”. Esta actividad es un llamado participativo que se realizará en la escala El Peral, transformada en esta ocasión en un instrumento musical.

“Con su bastón, el ciego posee el secreto para tocarla. Por supuesto, la persona vidente también está invitada a activar esta instalación. Al subir una escalera, las personas que usan un bastón tienen que tocar el escalón siguiente para saber dónde se termina. Pusimos unos tubos de acero que resuenan cuando choca el bastón y generan así una escala musical”, finaliza el artista francés.

Fechas y exposiciones

El Placer de oír

Inauguración: 20 de Octubre, Centex 19hrs

Unos frascos vacíos están distribuidos en el espacio. Guardan en lo invisible, recuerdos sonoros: sonidos del cotidiano, de la ciudad o del espacio íntimo, sonidos escogidos con la singularidad del oyente, huellas sonoras de un lugar, un momento, una época. Los sonidos son de todo/as, pertenecen a quien los quiera escuchar, al capturarlos se vuelven acervo, resguardado durante el tiempo de la exposición. Al destapar los recipientes, se puede acercar  el oído al sonido que está encerrado para escuchar las memorias sonoras del puerto.

felixblume.com/elplacerdeoir

Escalera sonora

Inauguración: 21 de Octubre, 16hrs

A través de la instalación en la escalera El Peral, el bastón se convierte en baqueta – la del percusionista, la que es mágica – transformando la ciudad y el espacio público, en un instrumento musical. Con su bastón, el ciego posee el secreto para tocarla. Por supuesto, la persona vidente también está invitada a activar esta instalación. Por un instante, el vidente se pone en la piel de la persona ciega, experimentando la ciudad en un modo sonoro. Cada asistente a Centex puede hacer uso de un bastón y antifaz para vivir esta experiencia sonora.

felixblume.com/bastonsonoro

www.tsonami.cl [9]