Once familias que viven en la calle en pleno centro de Viña del Mar

Desde el pasado viernes, once familias se encuentran viviendo con carpas en las afueras del estacionamiento del supermercado Santa Isabel en calle Viana, ya que el cité donde viven está apunto de caerse producto del terremoto del pasado 27 de febrero. El municipio de Viña del Mar les otorgó una mediagua a cada jefe de hogar, pero el principal problema es que no tienen donde poder instalarlas.
El cité donde ellos vivían está casi en el piso, paredes en forma de S, techos caídos, cielos desnivelados, fue el saldo que dejó el movimiento telúrico. “Comemos de ollas comunes, todos somos comerciantes ambulantes, llevamos viviendo años aquí, quien lleva viviendo más tiempo son 26 años” nos cuenta Katherine Pérez una de las vecinas.
Hablamos con don Reinaldo Lagos, el cual está ocupado de organizar a los vecinos, nos contó que la directora de la Dirección de Desarrollo Comunitario (DIEDCO) de la Municipalidad de Viña del Mar, Paulina Vidal, les dijo que no podían otorgarle un lugar para poder instalar sus casas provisorias, ya que no tienen poder para hacerlo. Sin embargo, un joven que es voluntario de "Un Techo para Chile" les está gestionando con bienes nacionales un terreno para que puedan estar tranquilos. Además, agregó que “nosotros no pedimos un lugar regalado sino que sólo lo presten ya que no podemos arrendar uno, en el cité donde vivimos pagamos con mucho esfuerzo 90 mil pesos entre todos ya que la dueña de este lugar nos hace un favor prácticamente, cosa que en la municipalidad creen que cada familia paga esa cantidad”
Además del problema el cual los afecta, la alcaldesa Virginia Reginato en el diario “La Estrella de Valparaíso” declaró que “las personas que arrendaban, perfectamente pueden hacerlo en otro lugar y vivir tranquilamente”, dichos que para estas familias es imposible hacerlo. Además Lagos nos contó que Paulina Vidal había dicho que les entregaron ayuda, pero esta fue de 2 cajas con mercadería, 6 frazadas, 3 colchones, y que sólo fue para una sola familia.
En este lugar vivían 15 familias, de las que ahora solo quedan 11. Entre estas personas viven 18 niños, una menor de 7 días de nacida, una de 9 meses, otra de 10 y de un año, agregando a una mujer embarazada, las cuales deben lidiar con el frío, humedad y los peligros de la calle.
Joselyn Bustamante, una de las afectadas, nos contó que “la asistente social de la municipalidad nos amenazó con enviar a los niños a un hogar de menores si seguimos en estas condiciones” y que actualmente hay una niña hospitalizada por problemas asmáticos.
Paulina Vidal, directora de Dirección de Desarrollo Comunitario(DIEDCO), señaló que “al igual que con otros casos, se les recomendó su desalojo preventivo inmediato, dada las condiciones de habitabilidad de la vivienda que no prestaban la seguridad suficiente para sus ocupantes. Se les ofreció alberge municipal ubicado en el Gimnasio de la escuela Humberto Vilches, lo cual fue rechazado por las 15 personas de las familias afectadas. También se les ha prometido soluciones como la entrega de viviendas de emergencia en sitios provistos por ellos o algún familiar. Ellos, todos arrendatarios, no quieren aceptar esta ayuda y solicitan soluciones definitivas que no puede este, ni ningún municipio ofrecer en el corto plazo”, manifestó la directora municipal.

Añadió que “por tanto nada justifica que ellos se establezcan en carpa en dicho lugar y me atrevo a señalar que es una medida de presión para resolver problemas que no están ligados a efectos del terremoto”.