En la Ciudad del Patrimonio...se demuele

30 Noviembre 2021
Se podría solo quitar las secciones más dañadas de la escultura, afianzar lo necesario y evidenciar el daño, el cuál fue fruto de un estallido social.
Héctor González... >
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Foto: Wikipedia

Me cuesta entender, y quizá a much@s de ustedes, que la solución para el delicado estado del patrimonio arquitectónico porteño sea la demolición. Pasó hace meses atrás en el Bar Inglés, echando abajo una de sus fachadas, y ahora ocurre con el monumento a la Solidaridad de Mario Irarrázaval. Seré honesto, desconocía el nombre de la obra y su autor, pero si el nombre coloquial con cuál solemos llamar, pero que por cosas de respeto (y que en nada aportan) omitiré señalarlo.

Lo que si me preocupa es la forma en la que nuevamente llegamos a una "solución", la cual es: ¡Echemos abajo!¿Y qué hacemos con el cobre? Lo vendemos por Kilo!! Solución digna de la empresa de demoliciones Marioporzio, cuyo lema era: "Demoliendo se construye futuro".

Parece que en Valparaíso nos hemos tomado muy en serio esto como medida de solución al problema. Puedo entender que no existan los recursos para restaurar y dejar en el estado original que se encontraba anteriormente, pero si creo que podemos generar algunas soluciones que quizá no sean muy ortodoxas, pero que si al menos ayudarían a cambiar esta terrible lógica de cuidado que tenemos de nuestro patrimonio.

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Leyendo sobre lo que señala el escultor, está obra presenta una “estructura interna que hizo Codelco, es bien sólida y está muy bien hecha". De ser así, entonces, y no revistiendo un daño a las personas frente a un potencial colapso de la estructura, se podría solo quitar las secciones más dañadas de la escultura, afianzar lo necesario y evidenciar el daño, el cuál fue fruto de un estallido social. El monumento mostrará entonces sus cicatrices, un hecho histórico quedará en evidencia, y la vez, habremos rescatado una parte de nuestro patrimonio, evitando que la memoria se venda por kilo, porque demoliendo en una ciudad como Valparaíso, es imposible construir futuro.