Agustín Squella, Premio Nacional y candidato a la convención constituyente: “A la convención hay que llegar a escuchar”

Agustín Squella, Premio Nacional y candidato a la convención constituyente: “A la convención hay que llegar a escuchar”

03 Mayo 2021
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Desconcentración del poder, Estado Plurinacional, mayor equidad tributaria, dignidad como valor fundamental, mejorar las formas de participación, eliminar las supramayorías, establecer el acceso universal al agua y garantizar derechos económicos, sociales y culturales, son algunos de los principios que, a juicio del Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales, Agustín Squella, debieran estar en la nueva constitución.

Bajo el slogan de campaña “Escuchar, conversar y representar”, el candidato por el distrito 7 -quien para muchos, por su experiencia y credibilidad, debiera presidir la convención-, considera que ser constituyente no es un cargo, sino más bien una función, donde lo principal es tener disposición de escuchar porque no se trata de que “los constituyentes lleguen cada uno con su propia constitución bajo el brazo para echarla a pelear con las de los otros”.

Poniendo énfasis en que la nueva carta fundamental “no puede usar el lenguaje evasivo de la del 80, sino que uno más comprometido”,  el ex rector de la Universidad de Valparaíso, donde hace clases hace 50 años, aclara que “de una nueva Constitución se puede esperar mucho, pero no todo” y que “será un marco mucho mejor que el actual para que futuros gobiernos, legisladores, autoridades administrativas y jueces tomen decisiones en favor de los derechos de las personas y de la protección que éstas necesitan”.

Squella considera que los derechos sociales estarán en la nueva Constitución y el debate se centrará en cómo garantizarlos, ya sea por vías administrativas o judiciales, o por una combinación de ambas; que se debe optar por un sistema presidencial atenuado, o semipresidencial, “alejado del presidencialismo casi monárquico que tenemos hoy” y establecer un Estado solidario y protector: “Un estado subsidiario es como un futbolista en la banca: está ahí sin jugar a la espera de que ocurra una emergencia en la cancha entrar a jugar. El Estado debe ser siempre titular y estar en la cancha, claro que sin cometer fouls”.

El profesor Squella también ha puesto énfasis en que “la ciudanía debe acompañar a la convención, pero no rodearla; hablarle, pero no gritarle; participar, pero no twittear” señalando que “el proceso constitucional es gracias a la ciudadanía y con esta, no de espaldas a ella, pero en un clima de paz, tolerancia y respeto. Las constituciones democráticas se hacen con palabras y no por las armas ni por la fuerza, como pasó con la de 1980”.