Los cuestionamientos a los nombres elegidos por Michelle Bachelet suman y siguen. Ahora con dos designadas ministras. Se trata de las titulares de Desarrollo Social y Cultura, Fernanda Villegas y Claudia Barattini, quienes tienen deudas por el Crédito Fondo Solidario que utilizaron para pagar sus estudios universitarios. Además de ellas, tres designados intendentes están en la lista. 

Las críticas sobre esta situación, no se hicieron esperar e incluso llegaron desde dentro de la Nueva Mayoría. El diputado de la UDI, Gustavo Hasbún, aseguró que "No puede ser que en el gabinete permanezcan los tres subsecretarios cuestionados, las dos ministras y los tres intendentes. Aquí Michelle Bachelet tiene que asumir el rol que le cabe como presidenta de la República".

Y las morosas no son sólo las dos designadas ministras, son tres los elegidos intendentes de Antofagasta, Atacama y el Maule, los que también deben dinero. Uno por casi 10 millones de pesos.

En tanto, el Diputado Fuad Chahín Presidente (s) de la DC, aseguró que "Hoy día hay más de un millón de chilenos que están endeudados con la educación. Ese es justamente uno de los problemas dramáticos que tiene nuestro país y que tenemos que corregir. Por lo tanto, que algunas personas hayan tenido que endeudarse para estudiar y que tengan pendientes algunos de los pagos de sus créditos de Fondo Solidario, la verdad es que en ningún caso los inhabilita como para poder optar a un cargo".

Esta polémica que se suma a otros titulares: la salida de Claudia Peirano y a la posible renuncia de los nombrados sudsecretarios de Agricultura y Bienes Nacionales, Hugo Lara y Miguel Moreno.

 Mientras quienes dicen que lo de Lara y Moreno podría ocurrir en cualquier momento, sólo faltaría la orden desde dentro del comando de la Presidenta electa,  que por ahora se ve en calma, protegido y como es habitual en silencio.