Este martes se realizó una sesión extraordinaria del concejo a la que al fin asistió el alcalde, y en la que se trataron tres temas que debieron haberse aprobado hace tiempo, pero que la habitual improvisación de la Alcaldía Ciudadana obligó, nuevamente, a votarlo encima del plazo : el Modelo Transitorio de Gestión de los Ascensores, que consiste en extender por unos meses el mismo modelo de gestión actual; el nuevo contrato de arrendamiento del aparcadero municipal, que consiste en extender por unos años el mismo contrato de arrendamiento actual; y un acuerdo sobre el centro comunitario Las Cañas necesario para la postulación a un fondo de financiamiento.

La nota baja de esta semana fue la ausencia de la Agrupación de Usuarios de Ascensores, quienes han levantado el debate y las demandas entre la comunidad, porque fueron citados presencialmente por la administración a las 9.30 de la mañana, siendo que la sesión estaba programada para las 11. El alcalde y la directora de Desarrollo Económico insistieron que con ellos han sostenido un diálogo fluido y con reuniones constantes.

La breve sesión extraordinaria duró 34 minutos y al día siguiente se realizó la segunda sesión de la comisión de Patrimonio presidida por el concejal Daniel Morales, la misma comisión que la semana pasada causó polémica con toda la información que expuso, principalmente con la noticia del destino del monumento a la Solidaridad que será desmantelado y vendido como chatarra.

En la sesión anterior, la nueva Encargada de Patrimonio aseguró que su prioridad son las personas y no los edificios ni el comercio local, por lo que la consejera representante del Colegio de Arquitectos, Paz Undurraga, respondió con una detallada presentación titulada “La relación inseparable entre inmuebles y personas en el contexto del Valor Universal Excepcional del Sitio”, lo que al parecer dejó a varios sin palabras, o al menos a la aparentemente arrepentida encargada patrimonial que no emitió ninguna palabra en toda la sesión.

Luego, la asesora patrimonial Macarena Carroza expuso sobre el nuevo modelo de administración del sitio patrimonial, cuyas prioridades concuerdan con lo expuesto previamente, y confirmó que el nuevo administrador del sitio sería una Corporación Municipal. La encargada de Patrimonio tampoco emitió ninguna palabra.

Finalmente, se invitó a Mario Irarrázabal, autor de la escultura de la Solidaridad (o Lulo de Cobre) y representantes de gremios artísticos para conversar sobre la polémica por el desmantelamiento de su monumento. El concejal Morales explicó la manera en que se construyó la obra y mostró una novedosa forma de apreciar los daños actuales y antes de que los invitados pudieran intervenir, la directora de Desarrollo Económico, Adriana Saavedra, intervino para contradecir lo anunciado hace una semana por los directores de obras, emergencia, patrimonio y cultura, desautorizándolos y afirmando que el alcalde no ha tomado ninguna decisión respecto a la escultura y que solicitaron un informe técnico, anunciando una reunión del alcalde con el cada vez más confundido escultor para el próximo martes.