Von Baer responde a la Democracia Cristiana: "Tenemos un 70% de los compromisos cumplidos"

16 Mayo 2011

La ministra pidió a la oposición a no ser mezquina, en relación al estudio que realizó la Democracia Cristiana donde afirman que hasta el momento solo se han cumplido un 40% de las promesas presidenciales de Sebastián Piñera.

Equipo El Martutino >
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La ministra Secretaria General de Gobierno, Ena von Baer, manifestó la satisfacción  del Ejecutivo por el nivel de cumplimiento de los compromisos y propuestas contraídos por el Presidente de la República el 21 de mayo de 2010. La ministra hizo esta declaración, respondiendo al estudio que realizó la Democracia Cristiana donde se indica que Sebastián Piñera, solo cumplió un 40% de las promesas realizadas hace un año.

La Vocera de Gobierno señaló que “hicimos una completa revisión, llegando a la conclusión que el Presidente va a poder hacer una cuenta absolutamente contundente con un 70% de cumplimiento de aquellas propuestas y promesas que le hizo al país el 21de mayo pasado”.

En relación al documento elaborado por un centro de estudios ligado a la Democracia Cristiana,  Von Baer dijo que la oposición es mezquina y que debe reconocer los avances del Gobierno en su primer año y mirar el país en “grande”.

 “Resulta absolutamente sorprendente, parece una broma el informe que ha entregado la DC donde se dice que hay un 0% de cumplimiento en trabajo, ya que hay más de 480 mil personas que tienen un empleo nuevo o que reconozcan que hay un crecimiento económico por sobre el promedio que hemos tenido en los últimos años y hemos logrado disminuir en un 70% las listas de espera AUGE”, puntualizó la ministra Ena von Baer.

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LA DEMOCRATA CRISTIANA

LA
DEMOCRATA CRISTIANA ,ÁNGELA MERRKEL , JEFA DEL GOBIERNO ALEMÁN .
ASEGURÓ QUE LA FASE MÁS OSCURA DE LA HISTORIA ALEMANA FUE LA NOCHE DE
LOS CRISTALES ROTO FUE EL INICIO DEL HOLOCAUSTO Y RECONOCIO QUE AÚN
NO LOGRÓ ERRADICAR ANTISEMITISMO.LA CANCILLER RECONOCIÓ QUE EL
OBJETIVO DE ERRADICAR EL ANTISEMITISMO.

La conmemoración del 75° aniversario de la Noche de los Cristales contará con decenas de actos a lo largo de esta semana en toda Alemania.
La jefa del Gobierno alemán dedicó en esta ocasión su habitual
videomensaje de los sábados a la serie de pogromos y ataques que
tuvieron lugar en Alemania y Austria en la noche del 9 al 10 de
noviembre de 1938 contra ciudadanos judíos, sus propiedades y sus
sinagogas, y que estuvieron orquestados por el partido nazi.

La canciller alemana, Ángela Merkel, aseguró que en la Noche de los
Cristales (Kristallnacht), de la que el próximo 9 de noviembre se
cumplirán 75 años, Alemania se hundió como nación» y reconoció que aún
no logró erradicar el antisemitismo.
Merkel, que enmarcó estas
acciones dentro de «la fase más oscura de la historia alemana», abogó
por mantener una «exhaustiva cultura del recuerdo» en su país, para no
olvidar los crímenes del nacionalsocialismo y para combatir el racismo y
el antisemitismo».

La canciller reconoció que el objetivo de
erradicar el antisemitismo en Alemania aún no se conseguió y consideró
casi imposible de explicar, pero cierto» que a día de hoy en su país no
pueda haber ninguna institución judía sin protección policial.

A
su juicio, es importante la prevención y el recuerdo para cuando no
queden testigos presenciales de las violaciones de los derechos humanos
en el Tercer Reich y del Holocausto.
Merkel recordó en su
videomensaje que el 9 de noviembre también se recuerda la caída del Muro
de Berlín en 1989, por lo que esa fecha es, a la vez, un momento de
gran alegría y gran esperanza».

Ambas conmemoraciones llevaron
a la canciller a apuntar que Alemania debe ser siempre consciente de su
pasado para preparar de forma responsable el futuro.

Aún no se alcanzó el objetivo de que no haya más tendencias antisemitas en Alemania, aseguró.

ABEL REYES TELLEZ
PRESIDENTE NACIONAL
PARTIDO SOCIAL CRISTIANO
NICARAGUENSE {PSC}
ESCRITOR CRISTIANO
TEL.505 2249 3460
MOVIL.505 8882 7758.MOVIL. CLARO.8333 2038.
[email protected]
MANAGUA NICARAGUA

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LA DEMOCRACIA CRISTIANA

LA DEMOCRACIA CRISTIANA GARANTIZA EL ESTADO SOCIAL DEL DERECHO

La democracia cristiana, defiende el desarrollo humano integral, el fortalecimiento de las Instituciones del Estado Social de Derecho, el protagonismo de la Sociedad Civil y la vigencia de una economía social de mercado. Como corriente ideológica, busca diferenciarse de la izquierda y de la derecha,

La democracia cristiana en la animadora doctrinal de muchos partidos políticos, inicialmente de signo católico, que surjan en Europa durante las últimas décadas del siglo pasado. Conviene precisar que la mayoría de estos partidos no responderán en sus inicios a la matriz doctrinaria demócrata cristiana, la cual se reconocerá como referente de forma gradual.

El Estado social es un sistema que se propone de fortalecer servicios y garantizar derechos considerados esenciales para mantener el nivel de vida necesario para participar como miembro pleno en la sociedad.

La Democrático y Pluralista, inspirado en el Humanismo Cristiano, que promueve el desarrollo humano integral, el fortalecimiento de las Instituciones del Estado Social de Derecho, el protagonismo de la Sociedad Civil y la vigencia de una economía solidaria; para esto buscamos el acceso al poder político como herramienta para la consecución del bien común, la equidad, la consolidación de la democracia y el ejercicio de la ética social, en una comunidad de personas libres e iguales en la diversidad.
Buscamos de la justicia social, las libertades democráticas y la necesidad de contribuir al país con cuadros dirigenciales formados académicamente con actitud ética y conocimiento al servicio del bien común.

La democracia, por su propia naturaleza, es un proceso caracterizado por una enorme diversidad. Tan diversa como grupos humanos puedan existir con diferentes circunstancias, necesidades y aspiraciones. Por el contrario, los regímenes absolutistas, autoritarios, teocráticos, totalitarios o dictatoriales adolecen a través de la historia del mismo patrón nefasto de centralización del poder bajo el disfraz de la “unidad nacional”. Contrastan los sistemas auténticamente democráticos, porque cuanto más lo son, mayor es su tendencia a la descentralización.

La democracia es un concepto básico que implica el consenso de los gobernados para otorgarle un mandato administrativo a sus gobernantes. Un mandato que, en una democracia auténtica, se modifica con las circunstancias cambiantes y evoluciona de conformidad con la voluntad de los gobernados. Una voluntad que surge del consenso nacional necesario para el mantenimiento de un estado de derecho, pero que se manifiesta mediante mecanismos de consulta popular en las cuestiones cotidianas que deben resolverse por decisión mayoritaria.

La democracia participativa es una obra de todos, incluso de los perdedores en el proceso político de tomar decisiones, porque todos contribuimos a la controversia enriquecedora de la diversidad.

La democracia participativa auténtica no es más que un medio político que exige una capacidad de intervención directa y eficaz de cada ciudadano, estructurada por un estado de derecho, en el proceso de tomar decisiones en todos los niveles de la vida pública. Jacques Maritain, un filósofo francés que fue precursor de la ideología política demócrata cristiana,

La Democracia Cristiana con posterioridad a la 2° Guerra Mundial. Como se sabe los partidos inspirados en esta doctrina resurgirán con gran vigor después de la última conflagración mundial, cumpliendo un importante papel en la consolidación de la democracia y el surgimiento de la comunidad europea. Su acción a favor del bienestar y la calidad de vida de la población no ha sido desdeñable, aún cuando evidentemente no hayan concretado en su totalidad los ideales y anhelos de la vieja democracia cristiana. También, y ello resulta explicable por las circunstancias históricas, sus planteos y acciones se encontrarán asímismo signados por su confrontación con los modelos del rígido colectivismo imperante por entonces en otros países del mundo.

Al terminar la segunda guerra mundial y reorganizarse el mundo de acuerdo con nuevos esquemas jurídico-políticos, la democracia fue adquiriendo también nuevos calificativos. La tradicional democracia individualista y liberal recibió el adjetivo de “clásica” de acuerdo con las normas y patrones a que se habían ajustado los procesos democráticos, desde el siglo XVIII, en Inglaterra, Estados Unidos y Francia. Y a los estados de los diversos continentes que adoptaron este modelo, al menos formalmente, se les llamó países de “democracia clásica”. El esquema era el del viejo estado liberal de derecho, aunque con renovaciones y actualizaciones que imponían las circunstancias. Esas renovaciones iban por la línea de un neoliberalismo reformista, en el que había una mayor intervención del estado en el régimen de la propiedad, del trabaj o y de la distribución de la riqueza.

En abril de 1947, precisamente en la ciudad de Montevideo, se reunirá un grupo de personalidades que en Latino América compartían el ideario demócrata cristiano. En este encuentro se sentarán las bases de lo que después será el movimiento demócrata cristiano y el inicio de los partidos que en el Continente se funden inspirados en esta doctrina. Dicha reunión será convocada por el uruguayo Dardo Regules y los chilenos Eduardo Frei Montalva y Tomás Reyes Vicuña, el argentino Manuel Ordóñez, el brasileño Alseu Amoroso Lima, -más conocido por su seudónimo de escritor, Tristán de Athayde-, y finalmente Rafael Caldera que se adherirá pero no podrá concurrir porque la dictadura venezolana habrá de impedírselo. También concurrirá como invitado Eduardo Cayota, fundador en 1904 de la Unión Democrática Cristiana del Uruguay. En este congreso se creará asímismo la Organización Demócrata Cristiana de América, -ODCA-. En el año 1949, los participantes volverán a reunirse, también en Montevideo, testimonio de su firme resolución de impulsar y concretar en América el movimiento.

Una visión global y ecuánime sobre la historia del movimiento demócrata cristiano, revela la variedad de los caminos recorridos por éste, como asímismo, su aporte a la construcción de una sociedad a forjarse sobre la base de la justicia y la solidaridad.

Otra calificación de la democracia en los años que siguieron al triunfo de los aliados, fue la de la “democracia cristiana”, que tuvo vigencia por un largo periodo en Italia, con el gobierno de Alcide de Gasperi, y en Alemania Federal, con el liderazgo del viejo canciller Konrad Adenauer. A esa democracia, inspirada en la doctrina cívico-política de la iglesia católica, expuesta en las encíclicas de los papas, y especialmente en las alocuciones radiofónicas de Pío XII, se le aplicó también el título de “democracia social”, de inspiración cristiana. En este tipo de democracia hay un mayor respeto a la libertad personal y a la iniciativa privada, sin que se deje de reconocerla necesidad de la intervención estatal en los procesos económicos. Pero esa intervención debe estar normada por los principios de solidaridad y subsidiariedad, a fin de evitar cualquier totalitarismo estatal.

La Democracia Cristiana sostiene fundamentalmente el gobierno de la Ley, en oposición al mando arbitrario de los hombres.
Tanto en la conducta individual cuanto en las relaciones sociales, el hombre debe obrar, no según los impulsos de su prepotencia o capricho, sino según la ley, cuyo origen y razón de obligatoriedad derivan de Dios y cuyo cumplimiento satisface las aspiraciones humanas.
En lo social-político la primacía de la ley se realiza adecuadamente sólo mediante la ley positiva. Dicha ley ha de ser democrática por su concreto origen popular y válida por su sanción de los derechos naturales inherentes a la persona humana y por su ordenación al bien común.

La democracia Cristiana orgánica quedó así en el transfondo de las instituciones políticas en espera de mejores tiempos. Quizá algún día pueda prestar buenos servicios si se le asocia con la libertad política proveniente del pluralismo ideológico de una genuina democracia. La idea organicista, bien entendida, ha seguido inspirando diversos movimientos en la actualidad, en los que se pone de relieve la importancia y necesidad de la solidaridad humana en la vida social y política.

La Democracia Cristiana somos defensores del Estado de Derecho y la Democracia, en lo político, en lo social, en lo cultural y por ende en materia laboral. Estabilidad laboral para los obreros y campesinos, educadores, profesionales de la salud, hombres y mujeres entregados a una digna labor.

La Demócrata Cristiano sostiene como una de sus características esenciales un régimen social de libertad.
La libertad es una e indivisible: no hay libertad religiosa sin libertad política y no hay libertad política sin libertad económica. A cada derecho humano corresponde un deber y tiene que ser amparado por una libertad política que el Estado debe reconocer. Es a través de la libertad que el hombre debe alcanzar su bien individual; pero, es también con su buen uso que debe contribuir al bien común.

La Democracia Cristiana por principios está en contra de todo tipo de presiones políticas sobre los medios de comunicación y nunca apoyará medidas que establezcan un sistema jurídico que limite la libertad de expresión, afecte el derecho de informar,

Hay así multiples adjetivos de la democracia, si se toman en cuenta sus diversas formas de realización.Pero, en el fondo, hay que luchar por una democracia auténtica, por una democracia Lo importante es que los pueblos sepan vivir con libertad, dignidad y justicia. Y que sepan defender los valores democráticos hay que distinguir, ante todo, entre la democracia formal y la democracia real.

ABEL REYES TELLEZ.
PRESIDENTE NACIONAL
PARTIDO SOCIAL CRISTIANO
NICARAGUENSE.PSC.
TEOLOGO ESCRITOR CRISTIANO.
[email protected]