Por Francisca Lorenz Bertoni

Después de ocho meses de pandemia, es importante detenernos y observar qué ha cambiado a nivel personal, social y ocupacional, producto de la contingencia sanitaria Covid 19, ya que sin darnos cuenta, hemos llegado a normalizar lo que antes parecía una problemática, por ejemplo “celebrar un cumpleaños utilizando una pantalla” y se han transformado en problemáticas, aquellas cosas que antes eran obvias y parte de nuestra vida diaria, como por ejemplo “ya no poder abrazar a ese ser querido que está de cumpleaños”.

Como todo ha ido cambiando, así también, ha cambiado nuestro cerebro, esto debido a que hemos experimentado nuevas emociones, pensamientos, creencias y conductas, entorno a estas nuevas problemáticas que nos han obligado a modificar y adaptar la interacción social y el desempeño ocupacional, ya sea en nuestro trabajo, en las actividades domésticas, en las tareas escolares y/o actividades preescolares. 

Entonces, si ha cambiado nuestro cerebro, también han cambiado nuestros intereses y motivaciones, viéndose afectado nuestro estado de ánimo, control de emociones, capacidad de comunicarnos, resolver problemas, recordar cosas y lograr concentrarnos en algo que queremos hacer.  

Para entender los cambios que están ocurriendo en nuestro cerebro y mejorar nuestra calidad de vida personal, familiar y ocupacional, los invito  a aprender sobre qué es “NeuroEducación Consciente”, es decir comprender cómo funciona el cebrero y ser consciente de cómo adaptarse para aprender. “Intentar enseñar sin conocer cómo funciona el cerebro, será algo así como diseñar un guante, sin nunca haber visto una mano” (2018, Francisco Mora, doctor en Neurociencias), por eso es necesario aplicarlo en la vida diaria, a través de simples tips que les iré enseñando en mis próximas publicaciones.