Si bien la gran mayoría de las personas se preocupa por su salud en algún minuto de la vida, resulta preocupante constatar que parte importante de ellas, lo hacen recién cuando cumplen 50 años ocuando ya la cabeza está llena de canas.

Esta realidad puede no tener mucha importancia para quienes llevan una vida sana y no tienen mayores inconvenientes. Sin embargo, hay quienes debieron tomar medidas mucho antes de cumplir medio siglo, pues seguro hoy sufren de enfermedades relacionadas con el envejecimiento y no están en óptimas condiciones. 

En este punto es importante saber distinguir entre la edad cronológica y la biológica. La edad cronológica corresponde a la cantidad de años que transcurren desde el momento que nacemos. En cambio, la edad biológica es un concepto que nos dice cómo está nuestro organismo en relación a la edad cronológica. 

Cuando conocemos por primera vez a una persona, ésta puede lucir menor, igual o mayor a la edad que tiene. Es probable que muchas veces te hayan dicho que te ves muchísimo más joven de la edad que realmente tienes, lo cual no necesariamente nos hace estar bien por dentro, ya que independiente de cómo nos veamos, la edad biológica indica cómo funciona el organismo, por lo cual es importante para todas las personas conocer ese estado.  

El problema está cuando todos creen que te vez mayor en 5 o incluso más años de los que realmente tienes. Lo peligroso de esta situación, no sólo está en el atentado contra el ego, sino que cuando luces mayor de lo que realmente eres, corres el riesgo de tener una o más enfermedades crónicas, males que no sólo son la mayor causa de muerte en el mundo, sino que también una de las principales causas de discapacidad en occidente. 

Pero, ¿existe alguna manera de realizar un diagnóstico de edad biológica? La doctora Paula Klein, candidata a magíster en nutrición y experta en medicina antiaging, nos explica que existe un cálculo de longevidad, en el que se analizan marcadores de riesgo precoz, considerando los clásicos factores de riesgo y aquellos que son protectores de la salud.   

Estos estudios, unidos a otras mediciones no tradicionales -como la medición del estrés oxidativo, la composición corporal, y diversos exámenes de laboratorio-, junto con la apreciación del médico, ayudan a determinar la edad biológica de un paciente. 

La importancia de realizar un diagnóstico de la edad biológica lo más detallado posible, es identificar a tiempo los factores que aumentan el riesgo de padecer enfermedades que disminuyen la capacidad personal o afectan negativamente la longevidad; y también, aquellos que protegen a la persona. 

No obstante, algunos tips que Paula Klein recomienda para no envejecer prematuramente son: llevar una dieta mediterránea rica en alimentos antioxidantes, practicar deporte tres veces por semana y evitar fumar y consumir alcohol en exceso.