Así se vivió la Hora del Planeta en Valparaíso

01 Abril 2012

Voluntarios formaron el símbolo de la campaña, 60+, cuya intención es incentivar ir más allá de sesenta minutos ejecutando acciones sustentables con el medioambiente.

Equipo El Martutino >
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Fueron 400 voluntarios, en su mayoría jóvenes, los que participaron en la noble campaña contra el cambio climático denominada “La Hora del Planeta”; manifestación ciudadana frente al cambio climático.

Con máscaras de oso polar (por el logo de la institución organizadora) y faroles encendidos con velas, los voluntarios se ubicaron en la Plaza Sotomayor para formar el símbolo de la campaña que es 60+ que lidera la WWF con el apoyo de la Confederación de Estudiantes de Ciencias Ambientales de la Educación Superior (CECADES) y de la Municipalidad de Valparaíso. 

De acuerdo a lo señalado por Susan Díaz, coordinadora nacional de “La Hora del Planeta”, “Valparaíso es la principal ciudad de Chile donde se celebró este movimiento global de lucha contra el cambio climático con la formación del símbolo que nos invita a ir más allá de 60 minutos buscando acciones sustentables y amigables con el medio ambiente”.

En la ocasión, Ricardo Irarrázaval, Subsecretario del Medioambiente, expresó que “Hay pequeños gestos que se pueden llevar adelante en el cambio climático como el ahorro en el consumo eléctrico, hídrico, los celulares, computadores, etc. Por lo que queremos ir más allá de sesenta minutos”.   

Por su parte, el alcalde Jorge Castro, agradeció a las organizaciones a cargo por confiar en la Ciudad Patrimonio de la Humanidad. “Desde Valparaíso agradecemos a la WWF y al CECADE porque nos han permitido ser la ciudad que invitó a todo el planeta a parar por 60 minutos con el consumo eléctrico”.


HISTORIA

Desde hace seis años, cientos de millones de personas de todo el mundo, empresas, gobiernos y centros educativos unen sus voces contra el cambio climático apoyando la mayor campaña de sensibilización organizada por WWF: la Hora del Planeta.

En 2011, más de 5.000 ciudades de 135 países apagaron las luces de sus principales monumentos y edificios emblemáticos, enviando así un claro mensaje: los gestos simbólicos pueden generar grandes cambios si conseguimos un compromiso global durante todo el año.