Por @MemoColumnista

El anuncio de la salida del país del grupo económico Laureate, agente financiero controlador de varias universidades privadas chilenas, no es un hecho menor, es el resultado de años de reclamos de muchos ciudadanos. Lo que ocurre es que las nuevas regulaciones y las actuales demandas sociales no entregaban las garantías necesarias para mantener este tipo de negocios, por tanto, cual zona de sacrificio el agente depredador abandona el territorio que ya no puede explotar.

Su llegada al país ocurría en tiempos de la ex Ministra de Educación Mariana Aylwin quien años posteriores mencionaría, en la prensa nacional, que no le parecía que este grupo realizara operaciones encubiertas para lucrar, pese a las cuestionadas maniobras legales y tributarias consistentes en arriendos de inmuebles y ventas de servicios que alcanzaban las decenas de millones de dólares, tal como lo describen los informes de investigación preliminar del Ministerio de Educación del año 2018, transformándose en un negocio más que rentable, superando a las ganancias del retail o las farmacias.

Varias han sido las figuras cuestionadas por los negocios de la educación superior, ya en 2010 se emplazaba al entonces Ministro de Educación Joaquín Lavín, quien formaba parte del directorio de accionistas de una reconocida universidad privada nacional, al igual que su colega Pablo Longueira, mientras que la banca ya tenía cientos de miles de créditos cursados con, un entonces “mercado” de más de trescientas mil personas. A la fecha, la cifra ha superado las ochocientas mil personas, por sumas billonarias y con una tasa de endeudamiento superior al 40% de los estudiantes, según informes de la Superintendencia de Bancos e Instituciones financieras.

Pero no nos alarmemos por esta partida, seguramente en un corto plazo, estos grupos financieros regresarán, ya que, cual juego tradicional de la “sillita musical” es muy probable que el señor Joaquín Lavín quiera postularse a Presidente de la República de Chile o la ex Ministra de Educación Mariana Aylwin quiera postularse como candidata a la Convención Constitucional, en conjunto con el excandidato presidencial Pablo Longueira y con ello, también vuelvan las garantías de estos grupos económicos, más que mal, la banca sigue cursando millonarios créditos para estudios superiores y este nicho podría volver a convertirse en un buen negocio explotable.