Continúan las aristas noticiosas surgidas de las fiestas clandestinas que se realizaron en una casa de Cachagua, las cuales quedaron al descubierto luego de una ‘funa’ subida a las redes sociales.

Y es que Gabriel Biggs, dueño de la casa donde se efectuaron estos eventos sociales (no permitidos por la pandemia de covid-19) –quien anunció acciones legales en contra del arrendatario-, entregó más antecedentes sobre el caso.

Según consignó La Cuarta, y en entrevista con Hola Chile, el propietario confirmó que sus vecinos se habían quejado por ruidos molestos, pero que, al consultarle al arrendatario, éste habría negado la situación denunciada.

“Me contacté con él al día siguiente de la primera gran fiesta y eso fue lo más terrible; me decía que ‘no, que los vecinos se estaban confundiendo’. Entonces, ahí fue como ‘pucha, a quién le creo, a mis vecinos o al arrendatario'”, manifestó Biggs.

MENSAJE DE WHATSAPP

Posteriormente, luego de repetirse la situación y que comenzara la ‘funa’ en redes sociales, el dueño de la propiedad reveló que el arrendatario lo habría amenazado con una demanda, a través de WhatsApp.

“Al día siguiente del carrete empezó una funa muy fuerte por redes sociales. Y el primer mensaje que me llega de él fue ‘¿quién escribió esta funa? Te voy a demandar si fuiste tú’. Quería saber quién fue el autor de la funa. Me escribió a mí”, contó Gabriel Biggs.

Te puede interesar también: "No se puede personar": Dueño de casa de Cachagua cuenta cómo quedó viviendas tras fiestas

 * Imagen de portada: Captura de pantalla TVN.