Ricardo Andrés Loyola

Sociedad de Historiadores del Marga Marga

Se ha sabido la noticia que la abandonada “Casa Italia” de Viña del Mar, otrora palacio, luego club, luego centro educacional, hoy una casa desaparecida en parte por incendios y en otra tras la maleza que crece como selva, será rescatada por el Consejo de Monumentos. Los concejales y la Municipalidad local lo celebran, pues no esta la situación económica para hacerse cargo de ella y su restauración, sin embargo, las alegrías deberían tomarse con un cierto recelo.

Conocida es la actitud política del citado Consejo, especialmente en la zona central y más aún en Viña del Mar, sin embargo, pese a ello algunos tenemos la esperanza que la recuperación de este patrimonio no se transforme en un reducto donde se alojen sus aliados políticos, personas o agrupaciones de dudosa reputación que polulan en la ciudad y la región bajo el manto de “defensores del patrimonio”.

La Casa Italia debe recuperarse, pero como un patrimonio de todos y no de unos pocos, ya que esa es la misión de un ente, supuestamente en este caso técnico, del Estado de Chile y al cual financiamos y pagamos todos y todas los chilenos y chilenas.

Foto: Agencia Uno/Huawei