Luz verde a pavimentación en Los Romeros, Concón: “La fractura de nuestro barrio y el robarnos la identidad es algo de lo cual esta gente tendrá que hacerse responsable”

30 Noviembre 2020

Si bien los habitantes del sector se organizaron para evitar que dicha iniciativa fuera llevada a cabo, una amarga noticia emitida el pasado martes 10 de noviembre confirmó sus temores: las obras de pavimentación comenzarían a realizarse. 

Matías Cortés Rosati >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano

Sin duda el conflicto de Los Romeros ha sido uno de los temas más controversiales que ha debido afrontar Concón. El icónico pulmón verde de la comuna ve amenazada su preservación por el polémico proyecto que busca asfaltar parte del circuito interno del barrio. Si bien los habitantes del sector se organizaron para evitar que dicha iniciativa fuera llevada a cabo, una amarga noticia emitida el pasado martes 10 de noviembre confirmó sus temores: las obras de pavimentación comenzarían a realizarse. 

Mediante un comunicado, “Los Romeros Natural”, agrupación ciudadana que busca evitar que la medida se concrete, se enteró de que el proyecto había recibido luz verde. La noticia generó malestar entre los vecinos, ya que se habían conformado mesas técnicas para poder llegar a un consenso y, eventualmente, conseguir una pavimentación sustentable. Sin embargo, no fueron escuchados y de igual manera fue aprobado. 

“Nos dimos cuenta que se nos pasó por encima como vecinos, incluso sobre propuestas y acuerdos que se dicen haber suscrito y que nunca ha sido así”, afirma el arquitecto Hernando González y vocero de “Los Romeros Natural”.

A raíz de aquello, González accedió a conversar El Martutino para compartir su apreciación sobre el caso y los siguientes pasos que deberán afrontar como agrupación para preservar el reconocido barrio parque de la comuna costera.

¿Cómo fue el momento cuando se enteran que las obras de pavimentación comenzarían? 

Nos enteramos de el inicio de las obras por un informativo que dejó la empresa constructora en nuestras puertas. Si bien en el desarrollo de un par de reuniones, realizadas meses atrás con la Secplac, se nos informó que las obras estaba por comenzar, nunca existió por parte del municipio un informativo y una comunicación clara, que era lo que esperábamos por parte de ellos.

Ustedes llevaron una propuesta alternativa a la alcaldía, sin embargo, no fueron escuchados, ¿qué conclusiones se pueden desprender de eso?

Efectivamente, al darnos cuenta que el desarrollo de la mesa técnica comprometida por el municipio no estaba funcionando con la agilidad y eficiencia que se esperaba, nosotros ingresamos por vía formal una propuesta técnica que, involucrando los debidos costos asociados, se plasmaba la visión de los vecinos. El equipo de técnico del grupo, conformado por arquitectos, tradujo, por una parte, lo que necesitaban los vecinos, pero también la manera de preservar la identidad de Los Romeros. Lamentablemente, este proyecto no fue considerado por el municipio y fue contestado con bastante demora. La respuesta no fue un acogida, en ninguno de los punto estructurales de la propuesta, ya que se consideró solo un tinte de materialidad en el entorno en la plaza La Paz. Esto, lo consideramos una falta de respeto, puesto que todo el trabajo que debió haber hecho el municipio, lo tuvimos que hacer los vecinos.

Uno de los elementos que marcan a las luchas medioambientales en la región, ha sido la poca participación ciudadana al momento de tomar decisiones, ¿crees que existe una ausencia en materia de democracia ambiental?

No hay ninguna posibilidad de hablar de democracia ambiental en Concón. Sabemos que ese es el gran talón de Aquiles que tiene nuestra comuna, ya que, de alguna u otra manera, afecta transversalmente a todos los ciudadanos. Además, sabemos que las regulaciones son extremadamente deficientes. En el caso de la Enap, los mismos planes de mitigación o los informes al respecto, los generan los mismos entes contaminantes, entonces es muy díficil pensar en una gestión objetiva y consistente.

Cuando nosotros planteamos nuestra propuesta, que se inicia como un contra al asfalto, no sólo hablábamos de la planificación territorial y la identidad de nuestro barrio desde un concepto urbanístico, sino que más bien desde lo ambiental. Esto, sabiendo lo que significa asfaltar una calle y el impacto ambiental que conlleva en un entorno local y comunal. Entendamos que Los Romeros se entiende como barrio parque debido a su aporte medioambiental a la comuna. Este es un tema que nos impacta directamente en la comuna y es un ejemplo más de que el tema medioambiental nunca ha sido prioridad.

¿Cómo se están organizando Los Romeros Natural para enfrentar esta nueva etapa? ¿Qué queda por hacer?

Bueno, han sido semanas muy difíciles, de mucha frustración y pena. Nos dimos cuenta que se nos pasó por encima como vecinos, incluso sobre propuestas y acuerdos que se dicen haber suscrito y que nunca fue así. Nos sentimos engañados y que se nos ha faltado el respeto. Pero eso solo nos da más energías para seguir defendiendo nuestro barrio. Si bien las obras van a iniciar, los primeros trabajos van enfocados al tratamiento de las aguas lluvias. Como vecinos seremos los primeros fiscalizadores de la empresa constructora, seremos lo mejores fiscalizadores del proceso.

Además, vamos a seguir activando todas las acciones necesarias para que el alcalde entienda que ya no están los tiempos para que sigan pasando por encima de la gente y que, las problemáticas que plantearon los pocos vecinos que patrocinaron este proyecto, no se resuelven con el asfalto. La fractura de nuestro barrio y el robarnos la identidad del mismo, además de nuestra calidad de vida, es algo de lo que esta gente tendrá que hacerse responsable.

Se viene un año cargado de elecciones, ¿Cuál es la importancia de que los nuevos liderazgos vengan una conciencia medioambiental formada?

En primer lugar, antes que preocuparnos del tema ambiental, tenemos que procurar que los nuevos liderazgos efectivamente existan. Ese es el primer trabajo que se tiene que hacer. En esa línea, nosotros como barrio, vamos a exigir estar en la agenda de todos los que aspiren a dirigir nuestra comuna. Por otra parte, el solo hecho de poner a Los Romeros como barrio en la agenda, transversalmente estás tocando temas medioambientales, porque todas las temáticas que afectan a nuestro barrio tienen que ver, directa o indirectamente, con lo medioambiental.

Ahora en términos particulares, debemos contar con un liderazgo en la comuna que pueda y sepa hacer gestión respecto al tema medioambiental como uno de los pilares dentro de su gestión. Actualmente, el tema medioambiental no es considerado y es solamente una derivada de las decisiones que, de buena o mala manera, se tomen. Si nosotros seguimos haciendo las cosas tal como la estamos haciendo, nuestro entorno y, por ende nuestro planeta, tiene sus días contados. Es devastador el panorama. Por lo tanto, es obligatorio que la nueva autoridad, sea del color que sea, tenga el medioambiente como su prioridad.

Algunas personas han asegurado que el pavimento afectaría la identidad del barrio, ¿estás de acuerdo con esa afirmación?

Por supuesto que afectará a la identidad del barrio, de diversas maneras. Lo más triste es que ya la afectó y profundamente, incluso antes de que el asfalto llegara, porque una de las grandes particularidades de nuestro barrio era que era una comunidad unida, y lo que ha generado con su tozudez y su cero capacidad de diálogo y gestión este municipio al respecto, es que nos fracturaron como vecinos y esa es lo que más afecta nuestra identidad. Ahora, por supuesto que hay otros aspectos que no quiero decir que sean secundarios, pero que tienen que ver con la planificación territorial, con la materialidad de su pavimento, etc.

Nuestro barrio es un barrio que tiene una condición de infiltración de su agua superficiales a sus napas (por eso también su característica de lo verde). Estamos luchando constantemente contra una deforestación indiscriminada del municipio. Cada vez hay menos árboles. Cada vez hay menos planes de tala y de mantención para poder evitar los accidentes que se producen por los árboles en descuido. Por lo tanto, las calles están botadas en nuestro barrio y la manera de resolverla es manteniéndola dentro de su condición y características y no tapandola con asfalto que, es un derivado del petróleo que aumenta la temperatura hasta cinco grados. En definitiva, acá se está llevando a cabo el proyecto más fácil y el más barato para un barrio que requiere decisiones particularmente distintas, pues es un barrio distinto. 

¿Consideran que el asfalto podría ser una eventual entrada para las inmobiliarias? 

No es que consideramos que el asfalto puede ser una eventual entrada. Lo que tú preguntas es un hecho de la causa en nuestro barrio. El asfalto viene desde la av. Concón Reñaca hacia dentro del barrio, es decir hacia el poniente. Si te das cuenta y ves el perfil de nuestro barrio, están todas las grúas levantando edificios justamente en ese sector, por lo tanto es un hecho verídico y no suposiciones. El hecho de que Los Romeros cambie su identidad -deje de tener calles de tierra, empiece a tener calles asfaltadas, empiece a ser una vía de circulación desde el Concón a la playa, empiece a ser una pista de carrera de asfalto- por supuesto que el barrio no va a ser lo que era antes y en ese contexto un barrio de asfalto y sin identidad hará mucho más fácil que las inmobiliarias puedan seguir su cometido de llegar hasta el borde del mar en el único sector de Concón de ladera de cerro que no tiene edificios. Por lo tanto, lo que está ocurriendo es un hecho premeditando de cómo se está depredando nuestro barrio, al igual cómo se ha hecho con las dunas y con el resto de nuestra comuna.

Algunas personas han aseverado que, debido al polvo e inundaciones, se ha hecho insostenible transitar por el barrio, ¿qué les dirías a ellos? 

Yo le diría a estas personas que estoy de acuerdo con ellos y que nosotros como agrupación entendemos eso. Pero el problema del polvo no es la calle en sí mismo, el problema del polvo es que las calles no están con mantención. Muchos años atrás, las calles del barrio eran tratadas con ciertos maicillos y algunas gravillas que permitían que las calles funcionarán en buenas condiciones, donde el polvo no se levantaba de manera significativa. Acá hay un abandono intencional del municipio respecto a nuestras calles para generar estas molestias, porque todos los problemas de inundaciones con aguas lluvias, donde habían problemas significativos, con el tratamiento del colector y de recolección de aguas lluvias fueron resueltos. Por lo tanto, nuestro problema de aguas lluvias se resuelve con una adecuada mantención de calles y con un tratamiento de conducción de aguas lluvias y una superficie de pavimentación con capacidad de infiltración superficial. Bajo esos criterios no tendrás ningún problema. El problema es que, justamente, con calles abandonadas y sin mantención, por supuesto que estos problemas se evidencian. Esa es la estrategia del municipio.

Finalmente, ¿cómo se están organizando Los Romeros Natural para enfrentar esta nueva etapa? ¿qué queda por hacer?

Bueno, han sido semanas muy difíciles, de mucha frustración y pena. Nos dimos cuenta que se nos pasó por encima como vecinos, incluso sobre propuestas y acuerdos que se dicen haber suscrito y que nunca fue así. Nos sentimos engañados y que se nos ha faltado el respeto. Pero eso solo nos da más energías para seguir defendiendo nuestro barrio. Si bien las obras van a iniciar, los primeros trabajos van enfocados al tratamiento de las aguas lluvias. Como vecinos seremos los primeros fiscalizadores de la empresa constructora, seremos lo mejores fiscalizadores del proceso.

Además, vamos a seguir activando todas las acciones necesarias para que el alcalde entienda que ya no están los tiempos para que sigan pasando por encima de la gente y que, las problemáticas que plantearon los pocos vecinos que patrocinaron este proyecto, no se resuelven con el asfalto. La fractura de nuestro barrio y el robarnos la identidad del mismo, además de nuestra calidad de vida, es algo que esta gente tendrá que hacerse responsable.