¿Problemas al corazón? Conoce estos 7 consejos para cuidarlo

¿Problemas al corazón? Conoce estos 7 consejos para cuidarlo

04 Agosto 2016

Hoy en Chile la mitad de los hombres y mujeres de 45 años, presentan factores de riesgo importantes que pueden derivar a futuro en afecciones cardiovasculares con el consecuente deterioro en su calidad de vida personal y laboral.

El Martutino >
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Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo y lamentablemente en nuestro país la realidad no es distinta. Según la Organización Mundial de la Salud, ataques cardíacos, hipertensión arterial, enfermedad cardiaca valvular o insuficiencia cardiaca, entre otras, representan la segunda causa de muerte de los chilenos entre 30 a 69 años. Así, el 25% de los hombres y el 20% de las mujeres fallecen prematuramente debido al mal funcionamiento de su corazón.

De hecho, hoy en Chile la mitad de los hombres y mujeres de 45 años, presentan factores de riesgo importantes que pueden derivar a futuro en afecciones cardiovasculares con el consecuente deterioro en su calidad de vida personal y laboral.

Según el cardiólogo de clínica Bicentenario, Ernesto Chaigneau, existe una serie de factores de riesgo que inciden en la aparición de enfermedades cardiovasculares. Los más tradicionales son ser hipertenso, fumador, sedentario y sufrir de diabetes y obesidad. “La hipertensión también se produce entre otras cosas por el hábito de fumar, porque a pesar de todas las campañas preventivas, todavía tenemos una gran población de fumadores”, señala el experto. Otra causa importante es el consumo excesivo de sal, porque ésta hace que el organismo retenga más líquidos aumentando la presión sobre las arterias.

El doctor Pedro Barreda, médico asesor de la compañía de nutrición Herbalife, asegura que la modificación de algunos estilos de vida constituye un aspecto clave para la prevención de las enfermedades cardiovasculares. Mientras, el doctor Juan Carlos Molina - ex presidente de la Sociedad Chilena de Geriatría y Gerontología- afirma que “las cosas que debemos hacer para tener una buena salud cardiovascular son varias y el error está en enfocarnos en sólo una”.

Son variadas las recomendaciones para cuidar la salud de nuestro corazón, aquí les presentamos las mejores que nos dieron estos y otros profesionales de la salud:

  1. 1.    Duerma bien y no se pierda la siesta

Duerma 8 horas diarias, porque el descanso permite reponer energías y evita consumir estimulantes o exceso de cafeína para rendir durante el día.

Además, se recomienda incorporar la siesta en nuestra rutina. Un estudio publicado en la revista Archives of Internal Medicine, aconseja dormir en las tardes unos 30 minutos tres veces por semana, lo que reduciría en un 37% el riesgo de muerte por una enfermedad cardiovascular.

  1. 2.    Evite el estrés y ansiedad

Intenta generar espacios para desconectarte. Prácticas como el yoga, pilates, meditación pueden ser de gran utilidad. Al generar una sensación de tranquilidad, reducen la presión arterial. 

  1. 3.    Controle su presión

La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias. Los niveles de una persona sana están bajo los 140/90 mm Hg. Es importante chequearla de modo constante. 

  1. 4.    Mueva su cuerpo

Otra de las claves para mantener un corazón sano es realizar actividad física al menos tres veces a la semana y por un tiempo no menor a 40 minutos. Disminuye la presión arterial y el riesgo de enfermedad cardiaca, ya que mejora la circulación sanguínea y baja la carga de trabajo para el corazón.

Se ha demostrado que el ejercicio físico regular puede reducir el riesgo de tener un infarto o morir por esa causa, en un porcentaje que fluctúa entre el 35 y 45%.

El corazón es un músculo como cualquier otro, si queremos que se mantenga sano y fuerte debemos entrenarlo con ejercicios especializados, “los brazos se entrenan con pesas y el corazón haciendo deportes que aumenten el ritmo cardiaco”, explica el médico pediatra y experto en nutrición, Pedro Barreda.

Por su parte, el doctor Molina agrega que el ejercicio practicado de manera regular y moderada juega un rol clave en la prevención de enfermedades cardiovasculares a través del control del colesterol. La actividad física hace que el gasto calórico aumente y con él la quema de grasas y la baja en los niveles de colesterol, sustancia dañina proveniente de las grasas que se acumula en las arterias e impide el paso de la sangre por todo el cuerpo.

  1. 5.    Evita el alcohol y tabaco

El tabaco reduce la cantidad de oxígeno en la sangre; estrecha y endurece la capa interna de las arterias, y hace que la presión arterial aumente. Además, es el causante de reducir los niveles de colesterol bueno (HDL) en la sangre y de aumentar los niveles del malo (LDL) y de los triglicéridos. Un cigarrillo diario es suficiente para aumentar el riesgo de ataque cardiaco o cerebral.

  1. 6.    Sea feliz

El doctor Molina es enfático en afirmar que “la depresión es igual de dañina para el corazón que fumar. Ser feliz debería ser una prioridad para todos”.

Las actividades que nos producen felicidad hacen que nuestro cuerpo genere substancias que le hacen muy bien al organismo. Según el geriatra, si manejamos de manera adecuada los niveles de estrés que nos presentan los quehaceres diarios tendremos una adecuada presión arterial y si hacemos actividades que nos produzcan placer, se liberará más serotonina –sustancia responsable del sentimiento de la felicidad-, más aún si son actividades físicas.

Cuando una persona se encuentra deprimida su química corporal cambia y su sangre se contamina y aumenta la posibilidad de que un coágulo tape una de nuestras arterias. “Este es el fenómeno que mucha gente relaciona con morirse de amor, cuando alguien fallece y su pareja lo hace luego. No es porque se rompa el corazón, sino que se debe a que se creó un trombo y este tapó una arteria”.

  1. 7.    Coma de manera equilibrada

Los especialistas concuerdan en que para tener un corazón sano debemos seguir una dieta balanceada, que en términos prácticos significa:

 -                     Reducir ingesta de grasas saturadas: Su consumo excesivo es uno de los principales factores que inciden en las patologías asociadas al corazón. “Las grasas saturadas propias de las carnes rojas, la grasa de la leche, mantequilla, margarina y yemas de huevo, suelen ser muy dañinas si las consumimos en abundancia. El exceso de colesterol de estos alimentos se acumula en las paredes de las arterias, contribuyendo al proceso de arterioesclerosis”, asegura el doctor Barreda.

 

 -                     Evitar dulces y chocolates: El especialista en nutrición señala que incluso más perjudiciales que las grasas anteriores resultan ser las que se esconden dulces, golosinas y chocolates, por lo que es imprescindible limitar su ingesta. Estas además aportan “calorías vacías” a nuestro organismo, o sea, no lo nutren.

 

 -                     Preferir productos integrales: Para lograr una dieta balanceada y sana, se debe reducir el consumo de carbohidratos refinados (harinas blancas), y optar siempre por productos como pan, galletas y arroz integrales, los cuales además nos aportan mayor saciedad.

 

 -                     Sal en su justa medida: Reducir el consumo de sal, pues no sólo la consumimos a través de la que adicionamos directamente a nuestros alimentos, si no que el sodio se encuentra presente en la mayoría de los alimentos procesados que consumimos habitualmente.

 

 -                     Aumentar el consumo de pescados: El Omega 3 -ácido graso esencial- presente en pescados como la sardina, atún, jurel y salmón, es muy importante en la salud cardiovascular. Su consumo previene la formación de coágulos y, por ende, los infartos al miocardio al disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos. Además, previene las arritmias, al optimizar la conducción eléctrica en las fibras cardíacas, asegura Alberto Rivera, especialista en química y farmacia.

 

El doctor Barreda, por su parte, acota que el real valor del Omega 3 es que éstos ayudan al corazón a protegerse del efecto tóxico del sobrepeso, colesterol, diabetes e hipertensión. Recomienda consumir pescado al menos 2 veces a la semana (no frito); incluir en la dieta fuentes vegetales de Omega-3, como la linaza, chía, nueces, soya e incorporar diariamente el consumo de suplementos alimenticios a base de este ácido graso, para ayudar a mantener niveles saludables de colesterol y triglicéridos.

Hoy nuestra dieta no nos entrega los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo, por lo tanto, “recomendamos consumir suplementos alimenticios que compensen dichas carencias”, dice el médico geriatra Juan Carlos Molina.