Frente al desafío de encontrar financiamiento, los emprendedores deben encontrar una forma elocuente para presentar sus proyectos y así contar con el apoyo de instituciones e inversionistas. El espíritu de un pitch es mostrar que un proyecto atiende a una necesidad importante del mercado con una solución innovadora y por esta razón, Tomás Egaña, portfolio manager de Fundación Chile, da los siguientes consejos para confeccionar un pitch que dé justo en el clavo:

Hablar lo justo y necesario

Es posible que existan varias aristas interesantes en un emprendimiento, como un buen modelo de negocio o un alto nivel de innovación, pero la cantidad de información no es proporcional al éxito del pitch. “Es importante enfocarse en una tesis, exponer la información precisa y con claridad para no entorpecer el entendimiento de la audiencia con demasiada profundidad” explicó el especialista de Fundación Chile.

Apelar a la emoción

La presentación del proyecto debe ser una experiencia para el espectador, además de informar es necesario generar una conexión. En esta línea, la forma toma importancia, es decir, los colores de la presentación e incluso el vocabulario usado. “Es relevante abordar el impacto del proyecto desde la emoción, mostrar cómo resuelve el problema buscando la empatía, porque la gente va a olvidar lo que vieron y lo que escucharon, pero no cómo los hiciste sentir”, agregó el experto, Tomás Egaña.

Adecuarse al público

Los emprendedores pueden deducir lo que los inversionistas esperan de una presentación al investigar cuáles han sido sus puestos de trabajo o qué tipo de preguntas hacen en un pitch. “Los intereses de los expertos son una pauta para que el emprendedor pueda llamar su atención, dependiendo de este factor la presentación puede tener pequeñas modificaciones” explicó el portfolio manager de la plataforma de emprendimiento de Fundación Chile.

Responder en una oración

Cuando comienza la ronda de preguntas, el emprendedor debe despejar las dudas siendo conciso y directo. “Si un inversionista hace una pregunta, demuestra que está interesado en el proyecto y una forma de generar una conexión es dar una respuesta que cumpla con las expectativas. Parece lógico, pero es fundamental contestar la inquietud inmediatamente, en la primera oración, y luego argumentar o contextualizar, no al revés” apuntó el experto de Fundación Chile.

Si bien estos consejos hacen que la presentación de un proyecto sea más interesante, no aseguran el éxito de un pitch, dado que el presentador debe tener habilidades para hablar en público, como una buena dicción y comodidad en el escenario. Al mismo tiempo, se debe demostrar el potencial del negocio con razones y argumentos comprobables y dar a entender las razones por las que se necesitan los recursos en pocos minutos.