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El colegio Luis Cruz Martínez ubicado en el corazón de la Ciudad del Sol es el primer establecimiento educacional de la comuna en contar con sistemas fotovoltaicos para abastecerse de energía solar, debido a la implementación de un proyecto desarrollado por el Centro de Padres y Apoderados, con el apoyo municipal y el Ministerio del Medio Ambiente.

El proyecto “Encuentro Solar” fue postulado a través del Fondo de Protección Ambiental, consolidándose el tercer proyecto que ejecuta el colegio desde el 2017 a la fecha. La iniciativa cuenta con la inversión de $6 millones y consistió en la instalación de un sistema fotovoltaico para abastecer de energía solar a la Biblioteca del Colegio con la idea de generar un laboratorio solar.

Se complementó con diversas actividades de capacitación y talleres para alumnos, apoderados y profesores, una de estas fue la implementación de infografías para el aprendizaje sobre su uso, los beneficios de la utilización de energía renovable y como se relaciona para combatir el cambio climático. “Estamos muy orgullosos de los logros alcanzados, los cuales nos acercan cada vez más a ser una comunidad educativa sustentable” indicaron desde el colegio.

La energía generada por el sistema solar se utiliza para la iluminación de la biblioteca, computador principal, un televisor y para un sistema de respaldo ante cualquier eventualidad de falta de suministro energético convencional en el establecimiento educacional de Quilpué.

En nuestro país existen diversos colegios y universidades que han implementado Energías Renovables No Convencionales para abastecer ciertas dependencias de sus establecimientos, esto como una medida reparadora ante la actual crisis climática y de enseñanza. Ejemplo de aquello son el Colegio Amanda Labarca y el Colegio María Luisa Bombal, ambos de Vitacura, a los que la Fundación Chile y la empresa Suiza Ernst Basler+Partner impulsan la estrategia “Vitacura Solar Techo 30+” con el objetivo de difundir el uso de energía solar fotovoltaica en la comuna.

Por otra parte, la Universidad Católica Campus San Joaquín contrataron a TRITEC-Intervento para instalar una planta fotovoltaica de 9 kWp con inyección trifásica con la finalidad de mejorar la eficiencia energética de sus instalaciones. La Universidad de Antofagasta, por su parte busca acercar las diferentes posibilidades de uso de la energía solar a sus alumnos y a la población de Antofagasta, con un proyecto compuesto por 5 sistemas solares fotovoltaicos de diferentes tamaños que en conjunto producen anualmente 41.491 kWh con un ahorro de 16,6 ton CO2/año.

La energía solar fotovoltaica permite no solo generar energía para viviendas, industrias, aeropuertos o para el sector agrícola, sino que también para los establecimientos educacionales, donde la energía proveniente del sol ayuda en gran medida aliviar el costo del mantenimiento energético de grandes infraestructuras como salas de clases y bibliotecas, pero también en la iluminación de varios metros cuadrados, por lo que resulta una alternativa que disminuye costos pero además ayuda al medio ambiente mediante el uso y el suministro de energía limpia.